- Lun, 11 Sep 2023, 23:07
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Hola, soy Francisca Fuentes, gusto en saludarle. Respondo como alumna en prácticas de la formación de sueño de CESI. Además de esto, soy enfermera y consejera de lactancia materna especialista en destete. Voy a intentar ayudarle.
Muchas gracias por compartir su inquietud en el foro.
Es normal que, a esta edad, las siestas sean cortas y frecuentes, ya que sólo tienen 2 fases del sueño, los bebés necesitan sentirse seguros y mantener en alerta a mamá o su cuidador principal (importante para la supervivencia), y alimentarse frecuentemente.
Sin embargo, de acuerdo con lo que describe, lo más probable es que la causa del llanto de su bebé sea porque está llevándola a dormir muy cansada, y efectivamente necesita que las siestas sean más largas.
Es importante recalcar que, antes de dormir, primero hay que relajar a la bebé, por lo tanto, si se espera a que esté muy cansada no podrá relajarla y por ende, le costará conciliar el sueño.
Por lo tanto, sugiero hacer un diario de sueño durante 1 semana, anotando los horarios donde su bebe suele mostrar señales de sueño (bostezos, apartar la mirada, esconder la cabeza contra el cuerpo de mamá) y así anticiparse 30 minutos a este momento para ahí llevar a cabo la rutina de la siesta. La idea es mantener esta rutina todos los días.
En estos 30 minutos previos a las señales de sueño, le sugiero:
- El uso de portabebés o fulares ergonómicos, ya que el contacto con el cuerpo de mamá va a ayudarla a relajarla y luego poder conciliar el sueño, además esto permite amamantar en una posición vertical, disminuyendo el reflujo. Si luego de amamantar a la bebé se coloca en la cama, puede empeorar el reflujo (ya que queda en posición horizontal), y por lo tanto, puede afectar el inicio de la siesta.
Las siestas en el portabebés/fulares tienden a ser más largas.
-Si es muy sensible a los estímulos, sugiero hacerla dormir en una habitación tranquila, sin ruidos ni luces
-Amamantar a libre demanda, respetando las señales tempranas de hambre (cuando la bebé abra la boca y/o comience a mirar hacia los lados), ya que al esperar a las señales tardías de hambre (llorar, agitarse, chuparse los dedos) va a dificultar la fase de relajación previa para poder dormir.
-Amamantar en posición de caballo modificada, tal como se muestra en la imagen:
Aquí la madre está inclinada 45°. *
*Recién a los 4 meses se puede amamantar sentada en 90°, ya que antes puede generar daño en la cadera de la bebé.
-Mantener la lactancia materna, ya que se ha demostrado que los bebés alimentados con leche materna tienen una disminución de los episodios de reflujo.
-Llevar periódicamente a controles de salud, para hacer seguimiento del reflujo.
También, aprovecho de anticipar que entre los 5 a 7 meses de edad, los bebés ya empiezan a distinguir el día y la noche. Durante este periodo, aumentan los despertares nocturnos del bebe, ya que se agregan más fases del sueño y aprenden a hacer más cosas durante el día (en la noche el cerebro procesa lo aprendido), por lo que, sugiero colechar y mantener la lactancia materna, para así poder atender rápidamente y de forma práctica a la bebé.
Saludos cordiales,
Francisca Fuentes Muñoz
Referencias bibliográficas:
Berrozpe, M. (2023) Módulo II: Unas nociones sobre el sueño (II). En Berrozpe, M., López, R. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro de Estudios del sueño Infantil (CESI)
Berrozpe, M. (2023) Módulo III: El sueño infantil. En Berrozpe, M., López, R. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro de Estudios del sueño Infantil (CESI)
López, R (2023) Módulo XII (I) El ABC del descanso. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro del sueño Infantil (CESI).
López, R (2023) Módulo XII (II) El sueño de 0 a 3 meses. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro del sueño Infantil (CESI).
López, R (2023) Protocolo de intervención CESI Dormir sin llorar, de 0 a 3 meses. La neurociencia del sueño infantil y sus implicaciones en la práctica y atención a las familias. Centro del sueño Infantil (CESI).
Francisca Fuentes Muñoz
Enfermera
Consejera de lactancia materna, especialista en destete