Mi hermano és otra vez mi hermano, le he escuchado decirle a mi madre de nuevo mami, lo he escuchado reirse hasta caerse al suelo, lo he visto llorar, hemos llorado mucho en estos meses, y lo más importante lo veo feliz.
Uno de los regalos que nos ha dado mi cuñada és a su hijo, mi hermano tiene a sus dos gemelos, a los que amo, y mi cuñi tiene a un precioso niño de cuatro años.
Hoy hemos cenado juntos y se me han saltado las lágrimas cuando al irnos el peque se ha vuelto corriendo y ha dicho: Abuela (A mi madre) Adiós niña!!!!!!!Y le ha estampado un besazo y un abrazo!!!!!!!!!!!
Estas recompensas de la vida son las que merecen la pena, me he estremecido y he esstado pensando en que los niños no entienden de parentescos, sangre o genética, entienden de roce y de Amor.