Llegamos a Ribadeo el sábado 10 y estuvimos justo una semana. Antes de llegar paramos en un pueblo de León para visitar a la familia, y Joel vió por primera vez un TRACTOR, y quedó tan prendado que ha sido su palabra favorita en las vacaciones y los veía cada momento o nos pedía que fuéramos a buscarlos.
Nos hemos alojado en un hotelito rural. La habitación estaba muy bien, amplia con sitio para que Joel correteara, aunque la dueña y los desayunos regular regular. No teníamos tele en la habitación, y como Joel ha seguido acostándose temprano, pues hemos tenido tiempo de leer, charlar y recuperar sueño perdido, y bueno, también hemos aprovechado para algo más...
El mismo día que llegamos hablé con Sole, y nos encontramos en su "cuartel de guardia" el mismo sábado; se conocieron los niños y se pusieron todos a pintar y los mayores pues también a conocernos y a charlar un rato. Hicieron tanto ella como Victor de anfitriones perfectos, recomendándonos sitios para visitar y restaurantes para ir a comer. Todo muy acertado la verdad. Y ellos encantadores. Y las princesas de Sandra todas de cuento y sonrientes, y Carlos en su fase ¿por qué? estaba encantador.
Hemos visitado sitios en la costa (playas y acantilados), pueblos pesqueros, valles otoñales de cuento, pueblos de montaña... Todo genial, porque además, no llevábamos horarios ni expectativas, así que todo nos parecía bien. Nos ha hecho bastante buen tiempo, excepto miércoles y jueves que chispeaba a ratos pero aún con temperaturas agradables, y ya el sábado cuando nos veníamos cayó una helada.... así que la visita a Lugo del viaje de vuelta la hicimos congeladitos.
Antes de irnos, Sole tuvo la gentileza de invitarnos a comer en su casa. Con diferencia, de los mejores sitios para comer de la zona . Es una excelente cocinera, y Joel se portó muy bien (como todo el viaje, la verdad). Estuvimos muy a gusto en su casa, como si nos conociéramos de toda la vida y nos trataron con mucho cariño. Ya te lo dije Sole, todo estaba buenísimo y nos encantó conoceros. No te dije que si alguna vez pasas por Madrid, me tienes para lo que sea.
Y bueno, esto ha sido todo más o menos.
De Lugo me traje unas empanadas buenísimas y en general hemos comido muy bien, así que repetiremos... ya veremos cuando.
Besos, voy a ver si me pongo al día que habéis escrito un montón!!!