- Mié, 03 Oct 2007, 12:42
#190152
Os voy a contar algo que hace tiempo me reconcome la conciencia.
Pronto hará dos años que falleció un amigo nuestro, a los 20 años de diagnosticaron Corea de Huntington , su abuelo había fallecido de lo mismo y su padre estaba en fase terminal, así que savia muy bien el futuro que le esperaba, decidió ocultarlo y vivir la vida de la mejor manera, siendo un gran amigo de sus amigos y una gran persona.
Cuando ya no lo pudo ocultar se nos cayó el mundo encima, nuestras conciencias no nos dejaban vivir, os preguntareis porque, es simple, la enfermedad tiene como síntomas tics involuntarios que daban a situaciones para él incomodas, para nosotros cómicas, no podíamos evitar reírnos, fuimos unos inbeciles con él, conociendo los antecedentes familiares nos lo podíamos haber imaginado pero ignorábamos que fuera hereditario en un 50%, suena a excusa pero no lo es.
Un día decidió que ya había llegado al final del camino, pero Dios le recompenso y no le dejo marchar por la puerta de atrás, le permitió despedirse de todos nosotros como es debido, porque a pesar de todo le queríamos, le queríamos mucho y intentamos demostrárselo yendo cada noche al hospital para estar con él, no se si lo conseguimos. Solo espero que nos haya sabido perdonar.
Yo estaba embarazada de 5 meses y todos me decían que me quedara en casa que no me convenía estar ahí por el embarazo, que no llorara porque mi hijo sufriría, pero estaba en deuda con él, aun así, siento que le fallamos como amigos y es un peso que no logro quitarme de encima.
Desde aquí le doy gracias por la lección que nos dio y por el legado que nos ha dejado, sin duda su muerte cambio nuestras vidas y nos enseño a ser mejor persona.
Si habéis llegado hasta aquí muchas gracias, tenia que soltarlo, el peso se ha aligerado un poco.
P.D. Con que mi hijo sea mitad persona que él ya me doy por satisfecha.
Pronto hará dos años que falleció un amigo nuestro, a los 20 años de diagnosticaron Corea de Huntington , su abuelo había fallecido de lo mismo y su padre estaba en fase terminal, así que savia muy bien el futuro que le esperaba, decidió ocultarlo y vivir la vida de la mejor manera, siendo un gran amigo de sus amigos y una gran persona.
Cuando ya no lo pudo ocultar se nos cayó el mundo encima, nuestras conciencias no nos dejaban vivir, os preguntareis porque, es simple, la enfermedad tiene como síntomas tics involuntarios que daban a situaciones para él incomodas, para nosotros cómicas, no podíamos evitar reírnos, fuimos unos inbeciles con él, conociendo los antecedentes familiares nos lo podíamos haber imaginado pero ignorábamos que fuera hereditario en un 50%, suena a excusa pero no lo es.
Un día decidió que ya había llegado al final del camino, pero Dios le recompenso y no le dejo marchar por la puerta de atrás, le permitió despedirse de todos nosotros como es debido, porque a pesar de todo le queríamos, le queríamos mucho y intentamos demostrárselo yendo cada noche al hospital para estar con él, no se si lo conseguimos. Solo espero que nos haya sabido perdonar.
Yo estaba embarazada de 5 meses y todos me decían que me quedara en casa que no me convenía estar ahí por el embarazo, que no llorara porque mi hijo sufriría, pero estaba en deuda con él, aun así, siento que le fallamos como amigos y es un peso que no logro quitarme de encima.
Desde aquí le doy gracias por la lección que nos dio y por el legado que nos ha dejado, sin duda su muerte cambio nuestras vidas y nos enseño a ser mejor persona.
Si habéis llegado hasta aquí muchas gracias, tenia que soltarlo, el peso se ha aligerado un poco.
P.D. Con que mi hijo sea mitad persona que él ya me doy por satisfecha.
Psicóloga
Creadora de DormirSinLlorar.com (2004)
Coautora del libro Dormir sin llorar (2014)
Monitora de Lactancia Materna
Telf. (0034)600425102
