William Sears (III)
1.13 Como se puede sentir el hermano mayor
1.14 Bebés de alta necesidad
1.13 Como se puede sentir el hermano mayor
1.13.1 Como se puede sentir el hijo mayor
Los tres años de vida de Molly fueron perfectos. Ella era el centro de atención en un triángulo de amor perfecto: mamá, papá y niña. Tenía la atención completa de sus padres para todo, y sabía exactamente que esperar. Nunca tuvo que compartir a sus padres con nadie.
Entonces llegó a su vida un intruso, tratando de ocupar su lugar central ¡Ha nacido una estrella! La gente rodea al joven rival con "oohs" y "ahhhs" y lo colman de regalos. Molly ya no es el miembro más importante de la familia. Cuando intenta obtener atención al mismo tiempo escucha "Ahora no, tengo que atender al bebé". Cuando llega una visita, ella es pasada por alto con un "Oh, que hermoso bebé". La desilusión ante su aparente degradación se transforma en enojo con el pequeño advenedizo ¿quién la ha destronado? y se siente confundida porque todos le dicen que tiene un hermanito tan lindo.
Muchos padres en esta situación tratarán de suavizar las cosas desde la lógica del adulto. Pero antes de hacerlo, deberían considerar como se ve la situación desde los ojos de su hija: "Piensa en el lado positivo, haz ganado un compañero de juegos". (La lógica de la niña: "Tengo compañeros de juegos de sobra ¿Acaso yo pedí uno más? Y éste no puede jugar - todo lo que hace es llorar") "Mamá y papá te aman igual" ("¿Entonces porqué el bebé está siempre en sus brazos y yo no?") "Necesito estar más tiempo con tu hermanita porque los bebés necesitan mucho a su mamá, como tu cuando eras un bebé" ("Yo prefiero ser todavía bebé. Y necesitar a mamá también. Además, yo no recuerdo haber sido un bebé") "Mamá está ocupada, pero tu y papá pueden hacer algo especial" ("¿Porqué necesitan un bebé? ¿Yo no era lo suficientemente buena?") "Tu te vas a acostumbrar a ella, y ella va a ser divertida para jugar" ("Odio a esa bebé. Ella destruyó toda mi alegría. ¿Cuándo vas a devolverla mami?")
Meses después de hacerse esas ilusiones, la realidad la golpea. El bebé no fue devuelto. De hecho, está creciendo, gateando y metiéndose en todas sus preciosas posesiones antiguas. Entonces, la niña se atrinchera para defender su territorio del enemigo, que destruye sus torres de bloques y molesta a sus compañeros de juegos. La hermana mayor dedica el resto de sus años de niñez a competir por el premio familiar: la atención de sus padres.
1.13.2 Introduciendo al nuevo bebé: 11 formas suaves
Algunas disputas entre hermanos son inevitables, aunque el grado de éstas depende de los años de los niños, de la compatibilidad de sus caracteres y el nivel de conflicto que los padres permitan. Un niño criado con apego tendrá un periodo de adaptación a la nueva situación más sencillo, ya que él obtuvo lo que necesitaba cuando lo necesitó. No se sentirá celoso viendo cómo otra persona ve cubiertas sus necesidades. Los niños alrededor de tres años, tres años y medio a menudo reciben al nuevo bebé en el hogar, bien con los brazos abiertos o como una novedad, y a veces parece que esos niños, al menos aparentemente, no parece que se sientan celosos. Ellos pueden competir más por un rato de juego con “su” bebé que por la atención de sus padres. Ser comunicativo le ayudará a adaptarse a los cambios. Pero es habitual para los más pequeños sentirse disgustados durante un tiempo (las cosas nunca volverán a ser iguales ni para los padres ni para el hermano mayor). Incluso tratando de hacerlo todo “de forma correcta” y ver cada pequeña herida en el hermano mayor en los primeros meses, una vez el nuevo bebé alcanza los ocho meses y puede gatear, el mayor sentirá que hay intrusiones en su espacio. Algunos trucos para presentar el nuevo bebé al mayor.
1.13.2.1 Hacerlos amigos antes del nacimiento
Habla a tu hijo mayor acerca del nuevo bebé antes del nacimiento. Dependiendo de su nivel de comprensión, comienza antes o después durante el embarazo. Puedes enseñarle fotografías de un bebé en el útero materno. Para un niño pequeño, si no está a la vista, no está en la mente, así que un bebé que aún no ha nacido, no amenaza su territorio, pero incluso un pequeño de dos años puede sentir si su madre está preocupada por lo que hay debajo de ese bulto en la barriga. Permite acariciar al bebé, hablarle, y sentir sus patadas. Pasa un buen rato hablando sobre él y planificando cosas.
1.13.2.2 Revive la primera infancia del mayor
Siéntate con tu hijo y repasa el álbum de fotos. Enséñale cómo era justo al nacer, al llegar del hospital, las tomas, el cambio de pañales... Reviviendo estos momentos, se va el mayor irá conociendo y se irá sintiendo preparado para esos momentos que se vivirán en el futuro.
1.13.2.3 Adelanta cómo será la llegada del bebé
“Cuando el pequeño bebé salga de la barriga, mamá lo tendrá en sus brazos todo el tiempo. Los pequeños duermen y maman todo el día y están en los brazos de mamá. Los bebés pequeños realmente necesitan a sus mamás”.
1.13.2.4 Incluye al mayor en las celebraciones del nacimiento
Además de estar con mamá y con el nuevo bebé después del nacimiento (si es que no estuvo en el nacimiento), pídele ayuda en la preparación de la “fiesta del nacimiento”. Puede elegir el pastel, la decoración, pensar en regalos especiales para y del nuevo bebé.
1.13.2.5 Incluye un regalo para el hermano
Los visitantes más avispados, aquellos que pasaron por la situación, traerán un regalo para el hermano mayor cuando vengan a visitar al nuevo bebé. Guarda unos pocos regalos de reserva para cuando los amigos sean espléndidos en sus regalos y atenciones hacia el nuevo bebé. Deja que sea él quién desembale los regalos del bebé y pruebe los sonajeros.
1.13.2.6 Compartir momentos
Junto con la incertidumbre de saber dónde encajan ellos en la nueva situación, lo que les preocupa más a los niños es compartirte con el bebé. Desde que el concepto de compartir es extraño para un niño de menos de tres años, y desde que la mamá es su “posesión” más preciada, es raro que puedas convencer a tu hijo de “compartir el tiempo de la madre”. Suena bien decir que le darás al mayor la misma cantidad de tiempo, pero en la práctica no es realista. Los bebés necesitan mucho tiempo de dedicación y no dispones del 200% de ti misma para dar (es por esto que las madres se dan permiso a sí mismas para desatender la casa y hablan a dedicar el tiempo al bebé y al hermano mayor).
Puedes también compartir el tiempo que dedicas al cuidado del bebé con tu hijo mayor. Lleva a tu bebé en una bandolera que te permita tener las dos manos libre para jugar con tu hijo mayor. Mientras des el pecho, puedes leer un cuento al hermano o simplemente abrazarle y mimarle. Aumenta el tiempo que pasas en el suelo. Mientras el bebé sea todavía pequeño, necesitará estar en tus brazos o en una bandolera. Puedes estar en el suelo con el mayor y él verá que estás disponible. A medida que el bebé crezca, puedes sentarle en una hamaca o en una manta en el suelo para que os vea jugar al hermano mayor y a ti. Esto entretendrá a dos niños con un padre. Prueba un juego para dos: cuando el bebé sea un poco más grande, anima a que el mayor entretenga al pequeño. Los niños de 3-4 años son especialistas en hacer caras y ruidos divertidos y a los bebés les encanta. Las grandes sonrisas sin dientes del bebé les va a alimentar el ego de forma increíble – “ey, le gusto”. Si amas al bebé, el sentimiento será pronto mutuo.
Recuerda, el bebé necesita ser siempre ser el primero (es pequeño y puede haber situaciones peligrosas), aunque el mayor pueda ser más persistente o bullicioso a la hora de expresar sus necesidades, y quiere saberlo. Muchas madres cometen el error de no crear lazos apropiados con el nuevo bebé por miedo a lastimar los sentimientos del mayor. Si el niño recibió lo que necesitaba cuando era un bebé, podrá manejar la frustración sin traumas. Un bebé no puede.
1.13.2.7 Haz que el hermano se sienta importante
Dale a tu hijo un trabajo en la organización familiar. Para sacarle fuera del “quiero ser un bebé”, hazle saber que juega un papel importante. Díle que necesitas su ayuda. Dale un título al trabajo, hazlo divertido: “puedes ser el ayudante de mamá, trae el pañal, por favor”, “trae la ropa para mamá”, “por favor, coge esos juguetes”. Permítele cambiar pañales, vestir al bebé, bañarle... (todo bajo supervisión, por supuesto). Elogia la ayuda que te da.
Un ejemplo de cómo una madre le ha dado la vuelta a los cambios en su hija de 4 años tras el nacimiento de su segundo hijo. Tan pronto como Bejamin nació, Amy pareció entrar en una crisis. Volvió a mojar la cama y a tener rabietas muy fuertes. La que antes era una niña feliz, se volvió triste. Empezó a contestar, a ser desafiante, se despertaba por la noche y a estar en general, molesta. La madre le dio un trabajo como “ayudante de mamá” e incluso le pagó por su ayuda. Después de unas semanas, Amy no sólo estaba más contenta, sino que aprendió algunas técnicas de su madre.
1.13.2.8 Mantente abierta a los sentimientos del hermano
Al hermano le disgustan tanto sus sentimientos de rabia por su hermano pequeño tanto como a los padres les preocupa sus sentimientos ambivalentes por su bebé. Anima al mayor a expresar tanto los sentimientos positivos como los negativos. Utiliza la empatía, como “Imagino que a veces te gusta el bebé y a veces no”. Ánimale a dibujar sus sentimientos por el bebé. Los niños a menudo se sienten seguros dibujando sus sentimientos. Cuando exprese pensamientos negativos como “odio a este bebé” trata de no decir cosas como “oh, tu no quieres decir eso. Tú amas al bebé”. Álegrate, ya que se siente lo suficientemente seguro para poder expresar esos sentimientos ante ti. Si oye por tu parte que sus sentimientos so nnormales y comprensibles, éstos perderán mucho de su intensividad inicial y podrá abrirse más. Todos necesitamos ser entendidos y aceptados.
1.13.2.9 ¿Qué gano con eso?
Esta es la forma en la que los niños piensan. Según la lógica del adulto, los niños deberían estar entusiasmados de tener un amigo viviendo en la misma casa, pero los niños que se encuentran en esta situación están preocupados por lo que ellos pierden. No ven la parte positiva. Ellos han perdido su papel principal, y el bebé es demasiado pequeño para divertirse con él. Mamá, desde que nació el bebé está cansada y no está alegre (la rivalidad entre hermanos llega en un mal momentos para los padres, ya que justo cuando los padres están exaustos adaptándose a un nuevo bebé, tienen que adaptarse tambie´n a los cambios que está sufriendo la personalidad del mayor). Revive “momentos especiales”, especialmente con el padre: salir al parque, ir a una heladería, incluso disfrutando de la compra del pan y la leche. Esos momentos de salir uno a uno con el padre están reservado sólo para el hermano mayor. La atención que el niño ha perdido de la madre, la gana del padre. “Pero nosotros le decimos que le queremos, eso no cuenta?” Sí, pero recuerda que lo que cuenta es cómo perciben los niños el amor de sus padres. Los actos dicen más que las palabras. Utiliza “Teniendo un tiempo”: Tu hijo mayor puede sentarse a tu lado mientras tienes al bebé en brazos (no es necesario bajar al bebé ni interrumpir la creación de los lazos con él). Disfrutad de su presencia a través del contacto cuerpo con cuerpo. Incluso aunque sólo sean 15 minutos al día pueden marcar la diferencia.
1.13.2.10 Protege las necesidades de los dos
“Llegué justo para ver cómo nuestro hijo de 3 años golpeó al bebé con un juguete”, lloraba una madre. Ante hacer daño al bebé, hay que corregir inmediatamente; la seguridad prevalece sobre los temas psicológicos. Pon tu mejor mirada no-vuelvas-a-hacerlo-nunca-más. Pon en marcha todas las paradas: Tiempo muerto para el niño (y también para el juguete). Ten en cuenta sus sentimientos, pero actúa de forma firme. Explica lo frágiles que son los bebés y que aunque comprendas sus sentimientos de rabia, no vas a permitirle que haga daño al bebé. Ayúdale a disculparse, “Acaricia la cabeza del bebé y díle cuánto sientes haberle hecho daño”.
Una vez que el niño ha podido expresar sus sentimientos, puedes dirigirte a ellos directamente, y él sabe que tu entiendes su lucha. Así puedes verbalizar “Es duro ver a mamá dedicando tanto tiempo al bebé”. Entonces enséñale cómo golpear un objeto suave, como una almohada, cuando esté enfadado, porque ella no sentirá dolor. Enséñale cómo ser “amable” con el bebé. Anímale a que le toque de forma suave, modela la caricia diciendo, “bien”. Siente la intimidad del abrazo triangular, padres, hermano mayor y bebé. Asegúrate de que entiende el mensaje de que nunca debe hacerlo de nuevo.
Anima al hermano mayor a que te diga cuándo se siente enfadado. Si es muy pequeño (por debajo de dos), esperar que controle sus impulsos de rabia es esperar demasiado. Esta es otra buena razón para llevar al bebé tanto como sea posible, por un lado el mayor te verá disponible, y por otro tendrás al bebé en un lugar seguro. No dejes a solas al hermano si es agresivo junto al bebé. No pondrá controlarse demasiado tiempo sin tu ayuda.
A veces, los hermanos mayores quieren investigar cómo es el comportamiento del bebé, queriendo tomar biberón el pecho. Dejar que prueben es la mejor forma de manejar su deseo. Peter se destetó de Martha a los 17 meses, y tenía cerca de 3 cuando Hayden nació. Observó muy de cerca cómo Martha daba el pecho el primer día y pidió un poco. Tomo una o dos veces, apenas podía cogerse al pecho, pensó en cómo solucionarlo y pidió dos biberones, que llevó durante un par de semanas y luego perdió el interés. Martha no le empujó hacia sentimientos tipo “odio a este bebé”.
1.13.2.11 El nuevo bebé tiene ruedas
A menudo los hermanos parecen ajustarse de forma maravillosa al bebé hasta que crece un poco. Un momento típico para que esto suceda es cuando comienzan a gatear. Ahora el mayor seinte que nada está seguro - sus torres son destrozadas, sus mejores juguetes mordidos, sus juegos interrumpidos, etc. La anticipación ayuda. Ten en cuenta que esto empezará a sucecer y explica al mayor por qué el bebé actúa como lo hace (necesidad de explorar, es excitante, es demasiado pequeño para entender) y de esta forma no se lo tomará como un ataque personal. Enseña al mayor cómo desarrollar la paciencia y la habilidad para planear. Puede poner sus juguetes en una mesa fuera del alcance del bebé, y puede construir una torre para el bebé, sabiendo cómo le va a divertir tirarla al suelo. Muestra que el bebé, después de todo, se está convirtiendo en alguien más interesante.
1.14 Bebés de alta necesidad
1.14.1 Doce características de un bebé con alta necesidad
1. Intensidad: Estos bebés ponen más energía en todo lo que hacen: lloran muy alto, comen vorazmente, sonríen con gusto y protestan con más fuerza si sus necesidades no son cubiertas a su satisfacción.
2. Hiperactivo: Relacionado con la intensidad arriba referida. Causa hipertonía muscular. Les va por ello muy bien el contacto físico, que les relaja.
3. Absorbente: ¿Sientes que tu bebé te "chupa" toda tu energía?
4. Mama frecuentemente: Eso significa que hay días que dudas ¿me habré convertido en un chupete humano? o que puede llegar a mamar cada hora, o cada 20 minutos, o cada... nadie le dijo a este bebé que los bebés maman con regularidad
5. Demandante: Si sientes que nunca llegas lo suficientemente rápido junto a él, sus demandas tienen un carácter de "urgencia" exagerada y a las 5 de la tarde todavía no te has podido duchar por atenderle.
6. Despertares frecuentes: Un bebé que necesita más de todo menos dormir; se despierta cada hora, por la noche puede ser desesperante. Y como se te ocurra toser o estornudar allí estará con sus ojitos abiertos.
7. Insatisfecho: Has probado todo y nada funciona ¿seré una madre incompetente? No, estos bebés son así, tendrás que jugar a prueba y error constantemente. cuando atines con lo que le pasa, no te olvides de felicitarte.
8. Impredecible: Lo que ayer funcionaba hoy no sirve. Vuelve a leer el punto anterior y deja de pensar qué estás haciendo mal.
9. Hipersensible: Se excita con cualquier cosa. Están siempre en estado de alerta, ruidos normales les sobresaltan. Muy empáticos.
10. Piel con piel: No les basta con que mamá esté cerca, quieren tocarla, así que quieren brazos, dormir con ella... extraen del entorno el máximo contacto físico posible.
11. No se calman solos: No solo necesitan ayuda para dormirse, como cualquier bebé; también la necesitan para seguir dormidos.
12. Sensible a la separación: La canción "Only you" es su tema favorito. Parecen vivir en una eterna fase de angustia de separación.
1.14.2 Veintiún consejos de superviviencia
1. Considera tus necesidades: Tú también tienes tus necesidades, por resumir: una madre muerta no le será de utilidad a tu bebé, luego no te olvides de ti. Haz una lista con tus necesidades y otra con las de tu bebé. Encuentra modos de satisfacer c9sas de las 2 listas a la vez. Ej.: pasear con bandolera te permite satisfacer tu necesidad de salir fuera de casa, y la del bebé de estar en contacto contigo.
2. Permite al bebe alguna frustración: Estar disponible constantemente forma parte del contrato bebe-madre, pero una madre resentida o mártir verá mermada su competencia y no ayudará al bebé en su desarrollo. Una vez que conozcas tus límites, estarás motivada para encontrar el modo de atender a tu bebé y él captará pronto el mensaje: la vida es más agradable cuando mamá es feliz.
3. Haz del dormir una prioridad: Duerme cuando tu bebé duerma y resiste la tentación de ponerte a arreglar la casa.
4. Practica la escritura terapéutica: Escribir te dará oportunidad de revisar cuales son tus sentimientos acerca de ti, tu bebe y tu maternidad. Haces revisión de tus procedimientos y evalúas que funciona y que no.
5. Se positiva, busca las cualidades de tu bebe: Todas esas características tan "negativas"... son semillas que bien regadas se convertirán en cualidades positivas. Tu bebé sabe lo que necesita y sabe pedirlo. Disfruta de que quiera estar tanto tiempo contigo. Mama tan frecuentemente que eres toda una experta en lactancia... Una vez que has empezado a ver las cualidades de tu bebe, la maternidad se hace mucho más fácil y llevadera.
6. Se paciente: Una flor no se hace y se abre en 2 días. Y aunque no puedas hacer nada más de momento, a tu bebé ya le sirve el hecho de que esté "ahí" con él.
7. Céntrate en lo importante: Déjate llevar por la corriente de los acontecimientos, céntrate en lo importante y no pierdas energía con pequeñeces.
8. Aviso sobre familiares y amigos: Uno de los puntos más difíciles de manejar son las críticas constantes de familiares y amigos que no saben nada de este tipo de niños y consideran que son "malos" y que vosotros no lo estáis haciendo bien. ej: "es muy demandante", pues respondes "no, es que sabe lo que quiere y es muy entusiasta pidiéndolo". Remarca sus cualidades ante otros.
9. Date cuenta de que tu bebe es único: Olvídate de esquemas preconcebidos y mira como es el bebé que tienes realmente. Intentar que se adapte a esos esquemas te hará perder eltiem0po miserablemente. Céntrate en encontrar las estrategias que funcionan con tu bebé.
10. No lo compares con otros bebes: Es fácil concluir que lo estás haciendo mal cuando tu bebé no duerme tanto como los otros bebés, o no se está quietecito como los demás. Tu bebé tienes unas características, nada más, que no son ni buenas ni malas en sí mismas. Pasa de etiquetas.
11. Sal de casa: Para un bebé el hogar es donde esté mamá. El espacio abierto del parque permite al bebé desfogarse y a la mamá relajarse.
12. Si te resientes haz cambios: ¿Empiezas a estar resentida con tu bebé, tu maternidad...? Introduce algún cambio en tu estilo de maternidad que te permita salir de ahí. Continuar con un estilo que funciona para tu bebé pero no para tí al final no funcionara para ninguno de los dos.
13. Consigue ayuda: Pronto te darás cuenta de esto. Averigua con quienes puedes contar y para qué.
14. Encuentra un grupo de apoyo o crea uno: Rodéate de padres que estén pasando por lo mismo. Podréis intercambiar trucos, ideas... Y recibir apoyo sin ser juzgados.
15. Tareas compartidas con el padre: Una maternidad que involucre al padre aportará: a ti, una ayuda muy necesitada; al padre, estar más cerca de su bebé y desarrollar sus propias técnicas parentales; al bebé, variedad de técnicas que le hacen sentirse bien, y que sólo el padre le puede dar.
16. Planifica por anticipado: Aprende a anticiparte a las necesidades de tu bebé, lo máximo que puedas, para evitar las dificultades en la medida de lo posible. Después de unos pocos meses sabrás a qué horas tu bebé es más manejable y podrás planificar tu día en función de esto.
17. Mira a largo plazo: ¡No va a durar siempre! Y si no te obsesionas, verás como sí hay progresos.
18. Mira con los ojos de tu bebe: Tu hijo se derrama el zumo sobre la camiseta cuando vais a salir. “Qué oportuno, qué desastre...” esas son las consideraciones desde el punto de vista adulto. En lugar de seguir rumiando sobre ellas ponte en el lugar de tu hijo y considera los efectos de la situación sobre él. Un cambio de camiseta desde una postura relajada te hará perder menos tiempo que si le abroncas, se pone a llorar, le cambias la camiseta de malos modos y terminas consolándole. Y tu hijo agradecerá tu comprensión.
19. Cambios grandes, gradualmente: Estos bebés son lentos para adaptarse a los cambios. Ej. Una mudanza. Prepárale para el cambio enfatizando lo positivo: nuevo cuarto, nuevos amigos, nueva escuela, un bonito parque cerca de casa... Déjale ayudarte a preparar los paquetes de la mudanza. Empaqueta sus cosas las últimas y desempaquétalas las primeras. Espérate alteraciones en su comportamiento por el estrés de la mudanza. Cuanto más rápido vuelva todo a la normalidad, antes volverá su comportamiento a ser el antes.
20. Tu eres también una madre con altas necesidades: Así que necesitas: más comprensión, más coraje, más ayuda y menos críticas. En realidad “Alta Necesidad” no se refiere solo al bebé, sino que describe las relaciones bebé-`padres. “Familia de Alta Necesidad” lo describe mejor.
21. No es culpa de nadie: Tener un bebé de alta necesidad no es algo problemático realmente. Tu bebé tiene su personalidad y tú tienes la tuya. La clave está en acoplarlas para no andar chocando continuamente.
22. Estudia a tu bebe: Un padre sabe un montón acerca de la paternidad...respecto de sus propios hijos, pero eso no significa que te sirva a ti. Un profesional sabe mucho por la interacción con muchos padres e hijos. Muchos consejos, y unos los encontrarás más útiles que otros. Olvídate de artículos tipo “10 formas fáciles de ser mamá”. Observar a tu bebe, anticipar sus necesidades, usar tu intuición hasta que tu empatía te sincronice con tu bebé, te llevará a no necesitar consejos y a confiar en ti misma.
1.14.3 Cinco razones por las cuales duermen diferente
¿Qué hace que los niños de alta necesidad necesiten más de todo menos dormir? Me preguntó una vez una madre cansada. Hasta que nosotros tuvimos un bebé con alta necesidad, yo habría aventurado que estos bebés estarían exhaustos al final del día y necesitarían verdaderamente dormir más, ciertamente como les sucede a sus padres. Un padre agotado una vez me dijo: “Cuando se duerme, yo soy un padre con alta necesidad”. He aquí porqué los bebés con alta necesidad duermen diferente.
1.14.3.1 Temperamento diferente
El mismo temperamento tenso que durante el día les causa necesidad, durante la noche les causa inquietud. Estos bebés sobreexcitados son diferentes de día y de noche. Su naturaleza hipersensible durante el día se conserva en sus hábitos de dormir durante siestas y noches. Su aguda conciencia y curiosidad acerca del ambiente que les rodea les conduce a mantenerse despiertos y conscientes durante la noche. Parece como que estos bebés tuviesen una luz interna que permanece encendida durante el día y que no es fácil desconectar durante la noche.
1.14.3.2 Diferente barrera de estímulos
Todo el mundo se lo pregunta: ¿porqué algunos bebés se duermen y permanecen dormidos en medio del ruido de una fiesta y otros se despiertan cuando pasas de puntillas junto a sus cunas?.Esto es porque los bebés tienen diferente barrera de estímulos, que es la habilidad de bloquear los estímulos sensoriales molestos. Algunos bebés tienen la asombrosa habilidad de bloquear su percepción cuando está sobresaturada, como si pudiesen concluir: “no puedo manejar toda esta conmoción, mejor desconecto”. Y entonces caen dormidos. Los bebés con alta necesidad no pueden hacer esta retirada y confiar en dormirse cuando están sensorialmente sobresaturados. Y lo que hacen es reaccionar de modo exagerado.
Esta inmadurez de la barrera de estímulos no solo les impide irse a dormir, sino también mantenerse dormidos. Bebés con una barrera de estímulos más madura pueden soportar una ligera molestia como la producida por tener algo de frío, algo de calor, un poco de hambre o estar solos un rato. Estas molestias nocturnas despiertan a los bebés con alta necesidad.
Ella siempre ha tenido un sueño extremadamente ligero. Tengo que desconectar el teléfono, no hacer uso de la cisterna, que no cruja ningún suelo o mueble, no toser ni estornudar. A veces siento como yo dejo de respirar y entonces ella cae dormida. Yo no puedo hacerlo de otra manera, esté sentada o dejando de pasearla, yo la sostengo hasta que está profundamente dormida.
1.14.3.3 Transiciones diferentes
Los bebés con alta necesidades no hacen las transiciones fácilmente. Ellos no admiten los cambios de buena gana. Pasar de los brazos al asiento del coche o al carro de la compra es duro para ellos. Pasar del estado de vigilia a dormir es el mayor cambio de conducta, y ningno de estos bebés puede hacerlo sin un montón de ayuda. Mientras otros bebés tú los pones en la cuna y permanecen dormidos, los bebés con alta necesidad deben antes estar profundamente dormidos para que esto suceda. Incluso bebés con alta necesidad ya mayorcitos. Sus mentes están tan aceleradas a la hora de ir a dormir (la hora que tú asignas para ello) que ellos no pueden desacelerarlas sin la ayuda de los padres.
1.14.3.4 Necesidades nocturnas diferentes
Los bebés muy pequeños emplean gran parte de su tiempo de sueño en una fase de sueño ligera llamada REM por lo cual ellos se despiertan con facilidad. Por la noche los bebés alternan fases de sueño ligeras con fases de sueño más profundas, cambiando de sueño ligero a sueño profundo para volver al sueño ligero otra vez, en ciclos que duran aproximadamente una hora. Cuando hacen la transición del sueño profundo al sueño ligero los bebés atraviesan un período vulnerable en el cual es más fácil que se despierten. En bebés más maduros el período de sueño profundo se alarga, de manera que entre el cuarto y el sexto mes, ellos ya duermen largos períodos de sueño profundo. Los bebés con alta necesidad parecen tomarse más tiempo en madurar en este aspecto. Ellos son más propensos a despertarse en este período vulnerable entre fases, aunque luego parezcan estar totalmente “borrachos“ en la fase de sueño profundo. Eventualmente estos bebés pueden estar más tiempo en la fase de sueño profundo aunque no “duerman de un tirón” toda la noche, como rápidamente hacen bebés menos sensibles.
Yo rápidamente caí en la cuenta de que el problema de sueño de mi bebé era en realidad un problema de la sociedad, por culpa de sus expectativas acerca de lo que debería dormir un bebé por la noche. Mi problema era que ella no siempre dormía de acuerdo a mis expectativas o a las de las normas culturales.
Tómatelo con calma. Intentar meterle prisa a tu bebé para dormir es algo destinado al fracaso porque los bebés duermen diferente que los adultos. En los primeros meses, a fin de alargar esa fase de sueño profundo, los bebés pasan a una fase de sueño ligero que dura 20 ó 30 minutos. Si en este período tratas de dejarle en la cuna muy probablemente se despertará. Necesitas seguir con tu ritual hasta que el bebé esté profundamente dormido. He aquí como saberlo: Mira su cara y sus extremidades. Si su boca está aún haciendo gestos o muecas, sus ojos parpadean y sus brazos están flexionados con los puños apretados, el bebé está aún en la fase de sueño ligero. Una vez que la cara del bebé sea inexpresiva, con los ojos y la boca quietos, las extremidades sueltas y las manos ampliamente abiertas (a esto lo llamamos signos de músculos relajados), sucede que está en la fase de sueño profundo, y puedes poner a tu bebé en su cuna y salir con cautela. Esta es una de las muchas facetas de la paciencia que los padres que cuidan a sus bebés deben aprender.
1.14.3.5 Características nocturnas diferentes
Demandar constante contacto físico y no ser capaces de consolarse a sí mismos son características de los bebés con alta necesidad durante el día. Ellos también tienen características nocturnas diferentes. Los bebés con alta necesidad demandan día y noche todo lo que les pueda dar sensación de bienestar, lo cual a menudo significa dormir en contacto físico con alguien, preferiblemente la madre. Ellos no se rinden ante ningún intento por sacarles de los brazos de su madre, incluso aunque se trate de una muy necesitada siesta. Parece que ellos necesitan un ambiente pseudo-uterino tanto de día como de noche. Pero para ser inconsecuente, según un bebé con alta necesidad vaya siendo mayorcito, la cercanía nocturna puede estimularles y despertarles mientras está cerca de la madre. Los bebés con alta necesidad tienen a menudo un alto grado de angustia de separación, el cual puede contribuir a crear problemas a la hora de ir a dormir.
Él no puede acomodarse durmiendo cerca de mí. Él tiene que dormir sobre mí.
1.14.4 Sentimiento F-L-E-X-I-B-L-E
Durante los primeros años de crianza de nuestra bebe de alta necesidad, yo tuve que oír a Martha usar el término “flexible“ cientos de veces. Flexible es exactamente lo que los bebés de alta necesidad hacen por y para sus padres. Aunque esta poderosa palabra tiene un doble significado, uno positivo y uno negativo. La crianza de un bebé de alta necesidad te fuerza a abarcar más, reevaluar prioridades (incluso cambiar de profesión), madurar tus pensamientos acerca de los bebés y volverte flexible y creativo más allá de lo que nunca soñaste.
Dependiendo de tu actitud hacia la crianza de un bebé de alta necesidad, el apoyo que obtengas, y los recursos internos de que dispongas, repetir flexible puede incluso distenderte como una goma, o hacerte resistente como un músculo. Sí, tú tienes que volverte flexible, casi elástico momento a momento en cada decisión de alta necesidad, aunque ¿hasta que punto tienes que evitar ser flexible para no romperte?. La maternidad es el más estresante trabajo que nunca has tenido. Es continuo. La dirección de la energía se dirige constantemente hacia fuera. Aún sin desafíos, ninguno deja de crecer en sus profesiones, especialmente los padres. La clave está en conseguir ser resistente como un músculo, no flojo como una goma dada de sí. Tu vida nunca será igual. Recuerdo a unos padres cansados decir una vez en mi despacho: “Yo seré feliz cuando esta etapa de alta necesidad pase y nuestras vidas vuelvan a ser normales”. Yo es recordé que como padres, desde ahora en adelante esta sería su vida normal. Hacerse padres es como ponerse un par nuevo de pantalones. A través del uso continuado, tú estiras la cinturilla, y gradualmente los sientes más cómodos; y los pantalones, como la vida, nunca vuelven a ser los mismos.
1.14.4.1 Confidencias de una madre flexible
“A veces yo pinto un cuadro más bien desagradable de este bebé de alta necesidad. La realidad es todo menos desagradable. Por supuesto yo ando muy privada de sueño y me exaspero cuando no consigo pasar de querer hacer las cosas. De cualquier modo Katherine es la persona más fascinante que he conocido nunca. Ella es extremadamente inteligente y aunque es demandante, parece tirar de la gente hacia ella. Sus abuelos están completamente cautivados con ella. La vida nunca es aburrida con sus pequeñas cosas. Ella está “on” casi todo el tiempo. Ella me ha enseñado a tener paciencia. Yo he aprendido muchas cosas porque me ha supuesto un desafío el encontrar nuevos modos de manejar sus demandas. He aprendido a disfrutar de la enorme cantidad de tiempo usado con ella. Curiosamente, No me gusta estar lejos de ella más de un par de horas. Mis amigos no pueden entender porqué no quiero más descansos lejos de ella. Parte de las razones por las que no quiero permanecer demasiado tiempo alejado de ella es que tendré que “pagar” por ese tiempo que he estado apartada teniéndola colgada de mí amamantando más. Pero en su mayor parte es porque yo prefiero tenerla conmigo ya que disfruto tanto de su compañía.
1.14.5 Manejando las críticas
Tener un bebé de alta necesidad puede convertirte en objeto de críticas. Para protegerte a ti y a tu bebé de advertencias no deseadas e inútiles, prueba estas sugerencias:
1.14.5.1 Mantén tus quejas en la privacidad
Haciendo públicas tus quejas te expones a ser criticada. Escoge cuidadosamente a quienes te quejas. No preguntes si no quieres respuestas. Si tu miseria necesita compañía, busca los oídos de aquellos amigos que piensan igual que tú y comparten tu filosofía de crianza, preferiblemente aquellos que también tengan bebés de ata necesidad.
1.14.5.2 Protégete a ti misma
Si tus críticos concluyen que te estás marchitando, ellos se sentirán impelidos a inundarte de consejos. Ellos pueden asumir que tu bebé es una carga para tí y que en realidad necesitas una pausa sin tu bebé. Mantén la cinta en marcha: “Actualmente, yo adoro tener a mi bebé conmigo todo el tiempo”. En efecto tu estás dándolo a entender “Estoy bien, no necesito tu ayuda, gracias.” Por supuesto, si hay otros tipos de ayuda que tú necesitas -con la vajilla, abrir una puerta- ahora puede ser un buen momento para pedir ayuda.
1.14.5.3 Respuesta ingeniosa para aguafiestas
“Los bebés no pueden echarse a perder... sólo ser nutridos“. “Los bebés, como la comida, sólo se echan a perder si son dejados sin atención en una estantería”.
1.14.5.4 Protege a tu bebé
Es fácil para tu bebé que su autoimagen se vea afectada por los comentarios de amigos y familiares. No permitas que te restrieguen valoraciones negativas acerca de tu bebé. Si eres invitada a una casa donde sabes que tu bebé será bombardeado con el mensaje “¿porqué tú no eres como los demás niños?”, no vayas. No discutas acerca de las características de tu bebé en casa si él puede oírte.
Pienso que mi bebé cree que él es malo, y se me rompe el corazón. Estoy segura de que él siente mis dudas y el aumento de críticas de otros miembros de la familia que piensan que sólo es un niño malo. Yo le tranquilizo diciéndole que él no es malo. Él tiene buen corazón. Cuando tenía 3 años de edad le dijo a mi tía: “yo soy malo, ¿verdad?”. Esto es particularmente difícil porque nuestro segundo hijo tiene un temperamento completamente diferente y parece tan “bueno”.
1.14.5.5 Se positiva
Amigos y familiares aumentarán el cómo tú valores a tu hijo.Si tú eres negativa, quejosa y pareces abrumada por tu bebé de alta necesidad, espérate que tus amigos reaccionen de igual manera. Pero si tú pareces entusiasmada y orgullosa de tener este energético bebé, ellos quedarán impresionados con sus positivas cualidades más que mirarle como tu “bebé problemático”. Si critican diciendo: “Ella es obstinada”, responde con: “Sí, ella es muy persistente”. Cuando critiquen diciendo: “Él es tan tempestuoso” responde con: “Sí, él tiene un montón de entusiasmo”.
Desde que Emily no llevaba bien estar lejos de mí, mi marido y yo tomamos la decisión de no dejarla de nuevo hasta que ella fuese lo suficientemente mayor para entender que estaba sucediendo. Recientemente nosotros hemos empezado a poner en duda nuestra decisión porque Emily es mucho más, como la gente la llama, la “niña de mamá”. Ella tiende a quejarse cuando está con gente que ella ve que no cumple unos requisitos mínimos, y gente que se porta como si hubiese un problema con ella, y dice cosas como: “Oh, Molly, has conseguido alejarte de ella”. Pero ¡yo no quiero alejarme de ella! El otro día, celebrando el octavo mes de mi sobrina, y como ella estaba pasando de persona en persona sin decir ni pío, mi madre dijo: “¿Verdad que es una buena bebé?”. Yo siento que Emily es también una buena bebé , incluso aunque ella sea una bebé de alta necesidad. Durante una reciente visita al doctor, mi suegra vino a quedarse con Emily mientras yo veía al médico. Después ella dijo algo que me sonó a música celestial: “Qué bebé más bien adaptado y feliz”.
1.14.5.6 Considera de donde procede su información acerca de la crianza
Tu madre, verdaderamente, quiere lo mejor para ti y para su nieto, pero ella te crió en una época en la cual los horarios, el biberón, la cuna, el corralito o parque, la zurra y el temor a echar a perder al bebé, eran prácticas habituales en la crianza. Naturalmente, sus puntos de vista sobre la crianza difieren de los tuyos. Acepta esto. Nada divide tanto a familiares y amigos como las opiniones acerca de la crianza. Selecciona aquellas prácticas en las cuales tu madre y tú estáis de acuerdo, y mantén la conversación centrada en ellas; para el resto, simplemente estás de acuerdo o en desacuerdo.
El mayor desafío que he encontrado no ha sido las necesidades de mi bebé, sino responder a las críticas acerca de nuestro estilo de crianza. Incluso nuestro médico de familia, que fué admirable durante todo el embarazo, ha expresado dudas acerca de nuestro enfoque. Es como si pensase que nuestras atenciones han causado su personalidad, en lugar de ser al contrario.
Mi peor problema ha sido manejar la presión externa, críticas e intolerancia con mi estilo de crianza -especialmente de mi madre, la cual puede actualmente ser cruel y no dejar las cosas estar. Ella insiste en que sea severa con mi hijo por amamantarle y no usar parque o corralito. Yo intento firmemente evitar con ella el tema de dormir porque ella piensa que yo debería avergonzarme por no poner a Alan en la cuna durante la noche, pero ella tiende a plantearlo en busca de un argumento. Está constantemente presionándome para que le destete, ella no tiene el concepto de “a demanda“, y se horroriza cuando escucha mis planes de dejarle a él escoger el momento del destete. Ella realmente disfruta con su nieto (incluso a veces a mis expensas), y yo no quiero alejarle de ella, pero he considerado mudarme más lejos.
Rodéate de una marea de valientes, no de críticos. No sientas que tienes que defender a tu bebé, o explicar tu estilo de crianza a todo el mundo. Tu bebé tendrá muchos críticos, pero solo una pareja de padres sabe que es lo mejor. Eventualmente, tu bebé se convertirá en la prueba viviente de que lo que vosotros habéis hecho es correcto. Así tus críticos al ver florecer a tu bebé, se darán cuenta que tu corazón verdaderamente guió por el camino correcto la crianza de este bebé. Unos pocos incluso se alegrarán de que tú no hicieras caso de sus consejos.
1.14.6 Descripción de cambios en la personalidad de bebés con alta necesidad según crecen
Las palabras que usas para describir a tu hijo con alta necesidad cambian con el transcurso de los años. Las características que te dejan exhausto durante la infancia son transformadas en cualidades que hacen a tu hijo un adulto interesante y dinámico. Intenta pensar que la personalidad de tu hijo es una luz positiva que ilumina por adelantado. Las etiquetas que parecen tan negativas serán características positivas en la futura personalidad de tu hijo.
1.14.6.1 Bebe
• alerta
• intenso
• absorbente
• demandante
• llanto impresionante
• volumen alto
• inconsolable
• hipersensible
• alta necesidad de contacto físico
1.14.6.2 Infancia
• ocupado
• muy nervioso
• exhausto
• valiente
• vigoroso
• testarudo
• impaciente
• fuerte voluntad
• obstinado
• despierto
• desafiante
• expresivo
• propenso a rabietas
• interesante
• sensible
• amoroso
1.14.6.3 Joven - adulto
• entusiasta
• profundo
• apasionado
• ingenioso
• dominante
• porfiado
• resuelto
• persistente
• perspicaz
• justo
• sociable
• compasivo
• empático
• inquieto
• afectuoso