Ayer la encontró por casualidad, estaba subido a una silla y la vio. Se puso muy pero que muy contento, "¡Mi caja de chupetes! ¡Está allí! ¡Cógela, mamá!". Yo temblando de miedo a que se volviera a enganchar. Aún así, como me la estaba pidiendo, se la di.
La abrió, sacó el que era su favorito, lo estuvo mirando, luego me mira y me dice: "No lo necesito mamá, ya soy muy mayor", y me devuelve la caja.
(¿Me lo como o no me lo como?)
Escritora, bloguera, traductora, y un montón de cosas más...
Mi blog: El mundo de Kim