Es un tema que me tiene un poco confundida, por muchas vueltas que le dé mi opinión sigue siendo ambivalente.
En parte, creo que es bueno: el premio le demuestra que he reconocido su esfuerzo, le hace ilusión y le motivará a seguir esforzándose en el futuro. Por otra parte, me gustaría que aprendiera que hay que hacer ciertas cosas simplemente porque son nuestra obligación, o son buenas para nuestra salud, etc., y no por obtener algo a cambio.
No me gusta la idea de decírselo de antemano porque suena a chantaje, si se lo digo después a lo mejor la vez siguiente esperará otra vez el premio y a lo mejor no puede ser. No me gustaría que no fuera nunca, pero tampoco quiero que tenga que ser siempre, y me cuesta horrores encontrar el término medio. En fin, que estoy hecha un lío.
Me gustaría saber qué opináis respecto a este tema, y cómo lo lleváis a la práctica en el día a día.
Besos
Escritora, bloguera, traductora, y un montón de cosas más...
Mi blog: El mundo de Kim