Mi peque tiene autentica FASCINACIÓN por la lavadora. Es que no sé qué le ve, pero en cuanto pasamos por delante, tenemos que pararnos para que eche un vistazo o la monta, con pataleta y lagrimones incluidos..
Si está funcionando se queda alucinada viendo la ropa dar vueltas, y empieza a echar gritillos de satisfacción.
Si está parada, se acerca gateando o andando con mi ayuda, abre la puerta (ya sabe abrir la puerta ella sola ) y prácticamente mete la cabeza dentro, para mirar y tocarlo todo. Toca los botones de fuera, pone las manitas en el tambor, vamos que le encanta!!
En cuanto crezca, le enseño a ponerla, que seguro que lo hace mejor que su papi!!