Últimamente, cuando estoy en casa con el peque, no quiere que venga nadie a vernos. No recibimos visitas a diario, pero de vez en cuando vienen los abuelos (afortunadamente, avisan antes). Se lo digo, y le parece bien, pero en cuanto suena el timbre no quiere que abra, cuando entran les dice ¡fuera! ¡fuera!, me dice a mí: los abuelos se van, los lleva de la mano hasta la puerta o los empuja para que se vayan .
Luego se le pasa y durante un tiempo está encantado, habla, les enseña sus juguetes, etc., y al rato empieza de nuevo con el ¡fuera! ¡fuera!
Ocurre solo cuando estamos los dos, si también está su padre no se pone así, y cuando viene alguien a nuestra casa, si vamos nosotros a la de ellos está encantado.
He pensado que a lo mejor piensa que las visitas distraen mi atención, o igual piensa que prefiero estar con ellos que con él (evidentemente no es así, pero igual es lo que percibe). Le explico que los abuelos, o quien sea, han venido porque le quieren mucho y tienen ganas de verle, que mamá también tiene ganas de verlos, que podemos estar todos juntos y cosas así, pero de momento no sirve.
¿Algún consejo? La verdad es que a los abuelos les sienta mal, no dicen nada, pero se nota que les duele.
Escritora, bloguera, traductora, y un montón de cosas más...
Mi blog: El mundo de Kim