Como ya he contado en alguna ocasión, Pablo y el coche nunca se han llevado demasiado bien... más bien todo lo contrario Era montar al nene en la silla y hala¡¡¡ a llorar como un loco hasta que llegábamos o parabamos un poquito a calmarlo...
Pues bien, este pasado fin de semana hemos estado en el pueblo en la casa que han reconstruido mis padres (era de mis abuelos). Desde Pamplona hay una hora justa en coche. Salimos el viernes a las 6 de la tarde y el tío fue tan feliz.... Le pusimos el CD del "Cantajuegos" e iba mirando por la ventana tan contento. Cuando quedaba un cuarto de hora empezó a protestar pero me puse atras con él jugando al balon y se acabaron las protestas. Y ayer domingo de vuelta igual.... estamos
Yo no se que le está pasando pero nos tiene alucinados: duerme bien, no llora en el coche... madre mía que bien le ha sentado su primer año¡¡¡¡