No comía nada de sólido, ni agua, ni suero durante 5 días, en que no paraba con las diarreas. Afortunadamente los vómitos sólo fueron el primer día. Perdió 800 gramos en 3 días, no tenía ganas de jugar, se dormía cada dos por tres, cuando él apenas duerme de día porque es un peque muy activo... y hasta el sexto día no probó nada que no fuera teta.
Yo me asusté y aunque no tenía síntomas de deshidratación, lo llevé al pediatra por la cantidad de peso que había perdido. Lo estuvo viendo y me dijo que mientras quisiera la teta, que no me preocupara porque estaba nutrido e hidratado.
10 días después está comiendo casi con normalidad. Empecé por alimentos astringentes, aunque fuera sólo 2 cucharadas de puré de patata... y ya ha empezado a recuperar peso.