- Mar, 26 Dic 2006, 10:06
#92089
Feliz Navidad!
Hace unos días en uno de los foros de dormir disteis una buenísima idea que yo adapté a mis necesidades y me ha salido muy bien. Alguien comentó que el repasar el día con los niños les ayuda a coger el sueño más fácilmente. Rocío no tiene problemas para dormir pero a veces se pone un poco terca a la hora de comer, sobre todo si soy yo la que estoy con ella. A mi me toca darle la cena habitualmente, porque el resto del día estoy trabajando así que el otro día, cuando a las tres cucharadas me empezó a decir que ya no le gustaba y que no quería más ( a pesar de que era una comida que sé perfectamente que le encanta y que se toma sin rechistar con los abuelos y con su papá, es solo conmigo con quien protesta) empecé a contarle todo lo que había hecho ese día, desde que la dejé a primera hora en la guardería, hasta que la recogieron los abuelos y luego se reunió conmigo al salir de trabajar. Fue estupendo, no me quitaba ojo de encima y comió todo de manera que no hubo batallitas, ni protestas, ni enfados, ni frustración por mi parte pensando por qué siempre los probemas a la hora de comer eran conmigo y qué estaba haciendo mal. Fue muy sencillo, luego leímos un cuento y se fue a dormir tan contenta. Os lo cuento para daros las gracias por la idea y para aportar mi granito de arena con mi experiencia por si ayuda a otras mamás que pasen apuros en estos casos. Ahora cuando no es la cena sino la merienda o la comida o el desayuno le cuento también lo que vamos a hacer a continuación. También me funciona. Besos y que paseis felices fiestas con vuestros pequeños tesoros.
Hace unos días en uno de los foros de dormir disteis una buenísima idea que yo adapté a mis necesidades y me ha salido muy bien. Alguien comentó que el repasar el día con los niños les ayuda a coger el sueño más fácilmente. Rocío no tiene problemas para dormir pero a veces se pone un poco terca a la hora de comer, sobre todo si soy yo la que estoy con ella. A mi me toca darle la cena habitualmente, porque el resto del día estoy trabajando así que el otro día, cuando a las tres cucharadas me empezó a decir que ya no le gustaba y que no quería más ( a pesar de que era una comida que sé perfectamente que le encanta y que se toma sin rechistar con los abuelos y con su papá, es solo conmigo con quien protesta) empecé a contarle todo lo que había hecho ese día, desde que la dejé a primera hora en la guardería, hasta que la recogieron los abuelos y luego se reunió conmigo al salir de trabajar. Fue estupendo, no me quitaba ojo de encima y comió todo de manera que no hubo batallitas, ni protestas, ni enfados, ni frustración por mi parte pensando por qué siempre los probemas a la hora de comer eran conmigo y qué estaba haciendo mal. Fue muy sencillo, luego leímos un cuento y se fue a dormir tan contenta. Os lo cuento para daros las gracias por la idea y para aportar mi granito de arena con mi experiencia por si ayuda a otras mamás que pasen apuros en estos casos. Ahora cuando no es la cena sino la merienda o la comida o el desayuno le cuento también lo que vamos a hacer a continuación. También me funciona. Besos y que paseis felices fiestas con vuestros pequeños tesoros.
también funciona contarle como lo has cocinado
