A ver, empiezo:
El 2 de septiembre por la mañana, al despertarme me note humeda y llame a mi marido que estaba saliendo por la puerta para ir a trabajar. Le dije que esperara un momento hasta comprobar si todo estaba bien, y al levantarme al primer paso que di encharque el suelo. Luego a cada paso que daba iba encharcando el suelo, así que le dije que no se fuera a trabajar, que habia roto la bolsa, que cojiera todo y yo me volvia a acostar hasta que el terminara. Llamé a mi madre para que se quedara con Moisés y cuando llegó mi madre nos fuimos directos hacia el hospital.
Ahí ya fue cuando empezaron todas mis preocupaciones, yo ya sabia que me iba a quedar y que mi parto ya no seria tal y como yo queria.
Cuando llegue al hospital me pasaron a monitores para ver si tenia contracciones, pero nada, no tenia ni una. Cuando me hicieron la exploración me dijeron que todo estaba bien, pero que no estaba nada favorable, que me iban a ingresar en planta y que si en 24 horas no me ponia de parto por mi misma me lo provocarian.
Buff, me entraron unos nervios y unas prsas, no queria que me provocaran el parto, yo no queria oxitocina.
Cuando me llevaron a planta y mi marido ya estaba conmigo, lo unico que queria era llorar, no hacia más que pensar que yo me queria poner de parto solita, así que empezé a andar todo lo que podia, pero nada.
A las 6 de la tarde me volvieron a mandar a monitores para ver como iba, pero nada de nada, no tenia apenas contracciones y no habia dilatado nada. Lo malo es que me metieron a monitorizar justo en la sala de dilatación donde estuve con Moisés, y me vinieron todos los malos recuerdos que tenia (para las que no lo sabeis, lo único malo de mi parto de Moisés fueron la cantidad de tactos que me hicieron que eran unos detras de otros, por lo que recuerdo mi parto con violencia). Pues cuando me intentaron hacer un tacto para ver como iba, el cuerpo ya se me empezó a poner tenso del todo y no me dejaba, con lo cual me hacian un daño horrible y como no conseguian nada me intentaban hacer más tactos, bueno que al final consiguieron ver como iba, pero jolin que daño.
Me volvieron a subir a planta y ya me djeron que si para las 8 de la mañana no me habia puesto de parto, me bajarian para provocarmelo.
Pues toda la noche con contraciones, pero nada de nada. El caso es que se hicieron las 8 de la mañana y me bajaron para provocarmelo, pero yo estaba de unos animos que no veais.
Cuando mi matrona me estaba preparando ya le comenté que no estaba de muchos animos porque las cosas no eran como yo hubiese querido y que habia hecho un plan de parto, pero que se me habia ido practicamente al traste. Enseguida notó que yo no estaba de muy buenos animos y empezó a preguntarme acerca del plan de parto (mi marido lo habia dejado en el coche).
Con los tactos más de lo mismo, enseguida se dio cuenta que iba a ser muy dificil hacerme los tactos porque le dijo a su residente que ni lo intentara conmigo porque no me dejaba, así que lo hizo ella.
Me colocaron el monitor y le pregunté si podia tener algo de movilidad, y me dijo que con el monitor puesto eso no era posible, porque se saldria, y que encima con la oxitocina. Pero al momentito volvio a entrar y a preguntarme si queria la silla de parto o la pelota de fitbal, yo elegi la pelota de fitball. Me ayudó a levantarme y me colocaron los cables de manera que me pudese sentar en la pelota. Así estuve no se cuanto tiempo, pero el monitor que controlaba a Selena no hacia más que caerseme, así que me pusieron un monitor interno, que me permitia más movilidad y de nuevo vuelta a la pelota. Hasta que estaba demasiado cansada y pedí acostarme en la cama.
Me hicieron muy poquitos tactos, pero cada vez que lo intentaban era horrible, mi cabeza decia de dejarlas para que me hicieran menos daño, pero mi cuerpo no lo permitia, se hacia automaticamente para atras, estaba demasiado tensa. El caso es que eran ya las tres de la tarde y no conseguia dilatar, estaba con contraciones constantes, muy dolorosas, peor no habia forma, la matrona me decia que acababa de estar de tres cm cuando deberia ir ya por cinco y medio.
Al final se sentó a hablar conmigo y me dijo en plan broma que si a las cinco de la tarde no conseguia nada me mandaria a casa a tomar un chocolate con churros (jo a mi eso me sonó a que si no conseguia dilatar me harian cesarea, que miedo). Bueno, despues de eso se puso muy seria y me explicó que era yo la que no estaba dejando trabajar a mi cuerpo, que toda esa tensión y negación a parir que tenia no me dejaba dilatar y me explico de dejar suelto mi cuerpo con cada contracción.
El caso es que cuando salio, ntenté hacerle caso, relajar mi cuerpo con cada contracción y dejar que Selena naciera. Cerraba mis ojos y me dejaba llevar. Sorprendentemente las contraciones se hicieron muchisimo menos dolorosas, y notaba como mi cuerpo se ba abriendo. Incluso mi marido que estaba preocupadisimo de tanto que estaba sufriendo por las contraciones me llego a decir al rato que hacia mucho tiempo que no habia tenido ninguna contracion, porque no me oia los suspiros que tenia antes de dolor. Cuando le dije que mirara el monitor donde se registran las contraciones se quedo alucinando, porque no tenia descanso entre una y otra.
Bueno, pues al rato llegó un momento en que ya no podia controlar las contracciones y llamé a mi matrona, le comenté que me dolian cada vez más y cuando me hizo un tacto habia avanzado muchisimo. SE alegró muchisimo por ello porque ese día habian entrado varias con la bolsa rota y todas acabaron en cesarea. Ella ya casi vio el parto, me pusieron un relajante muscular (creo que es buscapina o algo así, no me hagais mucho caso) y un chute de valium. Ella decia con mucha guasa que me iba a emborrachar con una copa de champan, jejeje. El caso es que al momentito estaba como borracha, no podia ni hablar, pero los dolores eran ya casi insoportables y me notaba ya unas ganas locas de empujar. La volvi a llamar y me decia que muy bien, que no pasaba nada que empujara y que lo mejor que me podia pasar era que se me callera en la cama.
Cuando ya no lo soportaba más (no tenia donde agarrarme en la cama), le cojia la mano a mi marido, pero llegó un momento en que me dio por morderme a mi misma y tirarme de los pelos, mi marido ya no sabia que hacer, me decia que lo cojiera a el pero yo tenia claro que si le cojia su mano le daria tal bocado que le haria hasta sangre.
Así que volvi a llamar a la matrona y cuando me vio que no tenia donde cojerme para empujar, dijo de pasarme al paritorio. Buff, los gritos que daba eran horribles. Cuando por fin tuve donde agarrarme para empujar, la cosa fue a mejor. Empezé a empujar y no recuerdo bien cuantos pujos hice, pero no fueron más de 4 o 6 y noté como salia la cabezita de Selana. Cuando ya habia salido, me dijeron que fuera despacio para no desgarrarme, pero por lo visto ya el cansancio no me dejó para más y me hice un pequeño desgarro (de segundo grado según el informe).
Me pusieron a Selena enseguida encima y dejaron a mi marido cortar el cordón (no lo hacen en nuestro hospital, pero al pedirlo y porque la matrona quiso lo dejaron). Ya no me sapararon a Selena para nada. Me pasaron a observación y a la hora y meda cuando ya habia mamado vino una enfermera y me pidio permiso para medirla, pesarla y hacerle las pruebas.
Bueno pues el resto ya lo sabeis nació el dia 3 de septiembre a las 18'05 y peso 3300kg y midio 54cm.
Solo me queda decir que tuve la suerte que me toco una matrona más que comprensiva y respetuosa. Y que tuve muchisima ayuda de mi marido.
Bueno, no me queda más tiempo, así que no me da tiempo ni repasar lo que he escrito, así que perdonar si no se me entende. Si se me olvida algo ya os lo pondre en otra ocasion.
Un beso a todas por leer el tocho que he escrito.