UNICEF Y EL MINISTERIO DE SANIDAD Y CONSUMO, A FAVOR DE LA LACTANCIA MATERNA Y CONTRA EL DÉFICIT DE YODO
Se estima que sólo el 23% de las madres dan de mamar durante 6 meses y que entre un 30% y un 50% de las embarazadas toman menos yodo del recomendado
Madrid, 24 de febrero de 2004.– El presidente de UNICEF-Comité Español, Francisco González–Bueno, y la Ministra de Sanidad y Consumo, Ana Pastor, han firmado el pasado lunes, 16 de febrero, un convenio de colaboración para promover la lactancia materna y prevenir los trastornos provocados por el déficit de yodo tanto en mujeres embarazadas como en niños y niñas. Ambos programas, que se incluyen como derechos esenciales en la Convención sobre los Derechos del Niño de 1989, serán impulsados por el Sistema Nacional de Salud.
Durante la firma del acuerdo, ambas instituciones destacaron la importancia de intensificar los programas de lactancia materna, imprescindible para el adecuado desarrollo del bebé y con indudables beneficios también para las madres. También se resaltó la necesidad de tomar medidas para erradicar los trastornos por déficit de yodo, promocionando el consumo de pescado marino y sal yodada.
....La Organización Mundial de la Salud considera
que la carencia de yodo en el organismo es la
principal causa evitable en el mundo de lesión
cerebral del niño durante el embarazo y del lactante,
así como de problemas en el desarrollo y
crecimiento durante la infancia, pudiendo ser
incluso causa del fracaso escolar.
Todos estos problemas orgánicos, que reciben el
nombre genérico de Trastornos por Déficit de
Yodo (TDY), pueden prevenirse y erradicarse de
forma sencilla y eficaz, mediante la aportación
suficiente de yodo al organismo a través de la
alimentación.
El Yodo es un elemento imprescindible para el
desarrollo y crecimiento del niño y para regular
funciones tan importantes como la frecuencia
cardiaca, temperatura corporal etc.
El organismo necesita un aporte mínimo de
yodo diario, que puede realizarse mediante el
uso de sal yodada en la alimentación y el consumo
de alimentos ricos en yodo.
En el caso de las mujeres en edad fértil, embarazadas
o que están dando de mamar a sus hijos,
aumentan considerablemente las necesidades de
yodo del organismo, por lo que será necesario
consultar al médico y, si éste lo considera necesario,
utilizar suplementos farmacológicos de
yodo.
......Atención especial a las mujeres gestantes
A pesar de tener una nutrición de yodo suficiente en los estudios realizados
en edad escolar, es posible que la mujer gestante sea deficitaria en
yodo, especialmente durante la primera mitad del embarazo, periodo
crítico para la formación, desarrollo y maduración del cerebro del feto,
que depende exclusivamente de las hormonas tiroideas maternas. Al
vivir en carencia de yodo, la madre sufre una hipotiroxinemia materna
(no acompañada de elevación de TSH), que va a repercutir negativamente
en el desarrollo cerebral y sobre todo auditivo del feto. Por ello,
la profilaxis idónea es aquella que evita la deficiencia de yodo desde el
momento de la concepción, por lo que lo ideal será que la mujer tenga
buenas reservas tiroideas de yodo ya antes de concebir para que al
embrión y feto le lleguen las hormonas yodadas de la madre en cantidades
óptimas para los tejidos que se están formando y madurando.
Para calcular las cifras de ingesta de yodo en la mujer gestante hay que
tener en cuenta el factor de dilución de la orina, ya que su volumen es
mayor. La ingesta diaria de yodo se estima considerando una diuresis
media de un litro para escolares y adultos y de 1,5 litros para la mujer
embarazada. En la Tabla nº 3 se recogen las recomendaciones sobre la
ingesta diaria de yodo en función de cada etapa de la vida:
Etapa de la vida Ingesta de yodo la día
Prematuros > 30μg/Kg/día
0 a 6 años 90 μg/día
6 a 12 años 120 μg/día
Mayores de 12 años y adultos 150 μg/día
Mujer embarazada y lactante 200 μg/díaICCIDD 200-300μg/día