Siempre, antes de irme a trabajar me despido de él. A veces (muchas) llego tarde, porque yo espero a que él lo comprenda, me de un beso y me diga adiós.
Ayer fui a una reunión a la guardería. Había una canguro que se encargaba de los niños de las madres que estábamos allí. Julio me vió al llegar y pensaría: ea, pa casa!. Cuando vió que yo le decía que no, que se quedara con luisa que yo iba con las otras mamis...dios mío, cómo lloraba! Me tuve que ir a la reunión, soy la tesorera y tenía que explicar a los padres nuevos unas cuestiones. En fin, un desastre.
Qué diréis que pasó por la noche? Lloriqueando dormido, me ha llamado mil veces (yo estaba allí con él) en, fin, una noche muy difícil. Hoy me costado media hora convencerle...
Cuento esto para compartir con vosotros lo importante que es para un niño saber que su mamá no les ha dejado, que es importante despedirse, y que cualquier cosa que, para nosotros no tiene importancia, para ellos es aterrador. Mi hijo no entendió ayer que yo lo dejara con la ganguro.
Y lo "pagué" caro. La próxima vez no lo dejo allí, o se queda con sus abuelos o yo no voy a la reunión