Mi hijo Álvaro, de siete meses y medio, no es nada aficionado a dormir. Al poco de nacer empezó con los cólicos del lactante. Se ponía muy nervioso y era muy difícil calmarlo. Tenía que pasearme con él en brazos, darle el pecho, cantarle... y aún así no resultaba. Cuando conseguía dormirse le dejaba en la cuna hasta que se volvía a despertar. Entonces me levantaba a darle el pecho y se volvía a dormir. Se despertaba de 3 a 4 veces. Cuando aprendí a darle de mamar en la cama (a los 2 meses), la primera vez que se despertaba por la noche le pasaba a nuestra cama y allí se quedaba, pues yo me dormía. Cuando los cólicos pasaron siguió necesitando dormirse en brazos y con la teta, y así sigo todavía. Por la noche no os puedo decir las veces que se llega a despertar para mamar, pero son bastantes, aunque varía de una noche a otra. Una vez se ha despertado y lo paso a nuestra cama ya se queda toda la noche, pues me resulta más cómodo. Algunas veces intento no dormirme hasta que acaba de mamar para dejarlo otra vez en su cuna, pero no siempre resulta, ya que si no está bien dormido se vuelve a despertar. Supongo que el hecho de que duerma conmigo influye en el número de despertares, pues tengo la impresión que cuando consigo dejarle otra vez en su cuna tarda más en despertarse. Total, que me paso la noche cambiándolo de lado para ofrecerle de los dos pechos.
De día se suele dormir cuando salimos a pasear y por la tarde hace una siesta de una hora aproximadamente. Un poco más larga si me quedo a dormir con él.
Mi "querido" pediatra me dijo en la última visita que un niño de esta edad ya puede dormir de 6 a 7 horas seguidas. Su respuesta a mi pregunta "¿y qué puedo hacer?" fue tajante:"Déjalo que llore y en dos semanas tendrás el problema solucionado. Está claro que si cuando se despierta por la noche tu corres a ofrecerle la teta el niño no va a cambiar. Lo primero que tienes que hacer es sacarle de vuestra habitación". Y yo me pregunto: ¿y qué hago, si cuando se despierta es lo único que quiere? Lo que tengo claro es que no voy a dejar de ofrecérsela si es lo que desea aunque sí que me gustaría poder encontrar alguna solución para que no sea tan a menudo. Y una última reflexión ¿cómo se supone que tengo que dormir mientras mi hijo está berreando como un desesperado en otra habitación? Sinceramente, creo que hay que ser muy inhumano para hacer eso y seguir durmiendo como si nada. Lo que más me preocupa es que haya madres que, por el hecho de ser su pediatra el que les dé las pautas para conseguir que su hijo duerma, sigan sus recomendaciones.
Espero vuestros consejos y muchas gracias de antemano. Laura.