Resulta que Patricia (que hace meses que duerme del tirón o casi) ha estado varios días llorando mucho de noche y con pesadillas, normalmente lloraba dormida, se despertaba varias veces y estaba un rato (traguito de agua incluido) hasta que se calmaba. Un día hasta tuvimos que recuperar el viejo truco del sofá y pegarnos allí un buen rato porque no podía ni ver la cama. Aunque había empezado el cole no lo relacioné porque justo comenzaron cuando ella empezó a quedarse allí contenta, los primeros días que lo pasó peor no tenía sueños ni pesadillas así que tuve que buscar otra razón.
¿Y qué era? pues para mí fue evidente. Resulta que en el cole tienen varios triciclos, ella en casa tiene uno pero hacía tiempo que no le hacía mucho caso. Después de dos o tres días de cole insistía mucho en querer usar el triciclo pero tanto los del cole como el de casa son muy malos y la pobre no sabía pedalear (en vez de hacer círculos con los pies los movía de arriba a abajo). Todos los días probaba con el triciclo y lloraba de rabia e impotencia por no saber usarlo, además me decía triste que los del cole tampoco sabía y que otros niños sí (claro algunos son un año mayores que ella). Ha estado así practicando a diario y con bastantes rabietas por el tema hasta que hace dos días por fin aprendió a manejarlos (a duras penas porque ya digo que son muy malos) pero ya sabe hacer el movimiento perfecto y un día que una niña le prestó su triciclo "bueno" lo supo usar de maravilla.
El mismo día que aprendió a usarlo acabaron los malos sueños y las rabietas por el día (que claro también habían aumentado).
En fin en este caso no pude ayudarla, tuvo que ser ella la que con su perserverancia resolviera la situación, pero he querido plasmarlo aquí para que veáis hasta qué punto cosas del día a día les pueden afectar de noche.
Solo espero que no todas las cosas le resulten tan difíciles de aprender porque sino