Siempre he pensado que cuando un niño llora es porque necesita que se le satisfaga alguna necesidad, así que cuando mi hijo lloraba por la noche comprobaba que todo estuviera bien: sin hambre, sin fiebre, limpio, sin calor, sin frío... y si seguía llorando en la cuna, me sentaba a su lado y le hablaba suavemente, diciéndole "cariño, es hora de dormir mi amor" y le cantaba suavecito, pero siempre me iba cuando él estaba despierto. Sólo se despertaba para comer cada 3 horas, y a partir de los 3 meses se sorprendió cuando empezó a saltarse las tomas nocturnas.
He pasado mucho tiempo a su lado, hablándole, en lugar de pasar el tiempo meciéndole, en brazos o no sé, lo que sea que hagan las demás mamás. Creo que el secreto es estar tranquila, transmitirle eso al niño, así que cuando yo estaba de los nervios (por tonterías, porque ya veis que Jon Ander no me ha dado nada de guerra) mi marido se encargaba; es gratificante comprobar que si yo estaba medio loca y mi marido tranquilo, el niño se dormía rapidísimo con él, y al revés claro.
¿Soy una mamá rara?