En desacuerdo con Laura Gutman: El fragmento escrito en la revista Unica por Laura Gutman me resulta lamentable. Si por dejar llorar a los niños se refiere al método Estivill, le sugiero que antes de escribir en un medio de difusión nacional (en su libro que ponga lo que le parezca) se lea al menos sus teorías. El método Estivill no es ninguna tortura (faltaría más) y una de las premisas para realizarlo bien y que no tenga consecuencias negativas en el futuro carácter del niño es que éste no sienta que sus padres lo abandonan en ningún momento. Sí, que el niño duerma es muy importante y que lo hagan los padres también. PF.
Respuesta: Nosotros seleccionamos cuidadosamente a nuestros autores, y más cuando tratan temas tan delicados y de tanta trascendencia como la crianza de los niños. El método Estivill puede ser muy eficaz en cuanto a los resultados a corto plazo, pero no hemos encontrado un solo estudio de psicología infantil que afirme que es inocuo, y sí muchos que constatan sus efectos. Lo que el Dr. Estivill propone -ir a ver al niño pero desatender su llanto- rompe la coherencia entre el lenguaje verbal y corporal de los padres, y es una fuente añadida de desconcierto y estrés psicológico para el niño. El resultado es como mínimo una pérdida de la confianza en sus padres y para éstos constituye un entrenamiento para desconectarse de su instinto y su capacidad de empatía. Que el niño abandone sus demandas puede ser un "logro", pero sus necesidades permanecen: aprende a resignarse. Puede informarse sobre los efectos del "desamparo aprendido" (learned helplessness), término creado por el Dr. Martin Seligman. Sobre las consecuencias del estrés psicológico en niños quizá le interese leer "The Complete Sleep Guide for Contented Babies and Toddlers", al cual se alude en otro artículo publicado en el nº de julio: "la verdad oculta detrás de los malos tratos". Por todo ello, nosotros preferimos difundir otras obras, como son "Bésame mucho" (Carlos González) o "Dormir sin llorar" (Rosa Jové). ISABEL FERNANDEZ DEL CASTILLO, coordinadora de contenidos.