No
estoy en contra del método. Simplemente quiero lo
mismo que se les pide a otros métodos o fármacos;
es decir, que alguien me demuestre que no son
perjudiciales para la salud.
De momento no hay ningún estudio que demuestre
que a los niños que se les ha aplicado este método
no tengan secuelas psicológicas de mayores. En
cambio hay estudios científicos importantes (Spitz,
Harlow, Bolwby, Mckenna,....) sobre lo perjudicial
que es dejar llorar a los niños, no consolarlos,
dejarlos solos etc...
El día que me demuestren que no es perjudicial
para la salud quizás lo recomiende, mientras
tanto......no.
No
estoy en contra del método. Simplemente quiero
que me demuestren lo que dicen.
No hay en todo el libro de Estivill una nota
bibliográfica de ningún estudio y de ningún
autor que avalen sus palabras. Me enseñaron en la
universidad que todo trabajo científico debe ir
acompañado de estudios y citas que avalen lo que
uno dice; en caso contrario, no es ciencia, sino
periodismo. Por cierto.....¿por qué un hombre de
“ciencia”, como Estivill, elige a una
periodista, como Silvia de Béjar, para escribir
su libro?
El día que me demuestren lo que dicen quizás lo
recomiende, mientras tanto....no.
No
estoy en contra del método. Simplemente quiero
que me demuestren que sirve para solucionar los
problemas del sueño.
Estivill dice en el prólogo de su libro que
funciona en el 96% de los casos (sin citar ningún
estudio que avale sus palabras, ¡claro!). En
cambio en el capítulo VI cita que hay problemas
que no tiene solución como las pesadillas (45% de
niños), el sonambulismo (15%), etc... A ver,
repasemos matemáticas. Si del 100% de niños con
problemas de sueño (donde se supone que incluye a
los de las pesadillas) el 96% se “curan” con
el método, pero el 45% del 100% no pueden ser
curados...... hay algo en esta suma que me falla.
O me sobran niños o me faltan curaciones.
¿Qué pasa? Pues que Estivill no tiene la solución
para los verdaderos problemas del sueño. Solo
trata esos casos leves de niños que tienen
necesidad de sus padres para dormir (cosa que se
cura sola con el tiempo). Lo único que les
“enseña” a los niños con su método es a
darse cuenta
de que nadie les hará caso y, por lo tanto, a la
larga aprenden a no quejarse más. Muchos ni
siquiera se duermen enseguida, sino que se quedan
quietos en silencio.
El día que me demuestren que sirve para
solucionar los problemas del sueño quizás lo
recomiende, mientras tanto....no.
No
estoy en contra del método. Simplemente creo,
como hacemos la mayoría de profesionales de la
salud, que ante un diagnóstico es de elección el
tratamiento menos agresivo para la persona.
Ante un niño que todavía necesita dormir en
compañía o que le duerman, hay muchas cosas que
funcionan, entre ellas el mecerlos, el dormir
acompañados o el dejar pasar el tiempo. La mayoría
de problemas se resuelven solos, y ¡total! si el
método es tan bueno, funcionará igual a los
pocos meses que a los 3 años (época en la que se
suelen solucionar gran parte de los problemas). ¿Por
qué empezar con el que hará sufrir más a
nuestro hijo?
El día que me demuestren que es el único método
que funciona en estos casos (o el menos agresivo)
quizás lo recomiende, mientras tanto......no.
No
estoy en contra del método. Simplemente me
pregunto ¿qué método?
Desde
Valman hasta Estivill conozco varios autores que
se han adjudicado la autoría del método en los
últimos 30 años. El que mejor lo ha desarrollado
es Ferber (de hecho, menos en España, en todo el
mundo a nuestro supuesto método Estivill, le
llaman método Ferber). Si tiene la oportunidad de
ojear su libro “Solucione los Problemas de
Sueño de su Hijo” (Ed. Medici), en la página
91 verá publicado el método “Estivill” 5 años
antes de que el primer “Duermete niño”
apareciera en el mercado.
¡Ah! ¡Por eso lo escribió una periodista!
Estivill simplemente hizo de intermediario: cogió
las ideas de Ferber y se las dio a Silvia de Béjar.
El día que me demuestren que el método Estivill
no es una estafa quizás lo recomiende, mientras
tanto......no.
No
estoy en contra del método. Simplemente tengo una
lista con 10 o 15 preguntas más que me quedan sin
contestar.
Soy persona de ciencia (o lo intento) y necesito
respuestas antes de hacer llorar a mi hijo.
El día que me den todas las respuestas que
necesito quizás lo recomiende, mientras
tanto.....
intente no creer todo lo que la
publicidad dice. Busque, investigue y pregúntese.
Sus hijos lo merecen. Rosa Jové, psicopediatra.
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