Pensamos que Ainhoa tiene un problema con los zapatos. leído así, parece una cosa absurda, ¿verdad?, pero paso a explicaros.
Está completamente OBSESIONADA. Pongo ejemplos:
- Lo primero que hace cuando se le acerca alguien es enseñarle sus zapatos y decirle "papos, papos". El/la que sea tiene q decirle lo preciosos que son porque si no, no para.
- Puede tener a su lado miles de juguetes, que si hay un par de zapatos por medio...todo lo demás no importa. Puede llevarse un buen rato jugando a ponérselo y quitárselos.
- Se pone hecha una furia cuando se los tenemos que quitar para bañarla (esto ocurre con todos los zapatos que tiene, no significa que tenga unos preferidos).
- Cuando se despierta por las noches lo primero que hace es decirme que "no papos". Muchas veces esto ocasiona llantos y en consecuencia desvelo, por lo que mamá los tiene a mano y cuando ve cómo va la cosa, se los pone. Al dormirse procuro quitárselos (para que respiren los pies) pero yo no sé q 6º sentido tiene que se despierta enseguida. Consecuencia: muchos días duerme con zapatos.
- Le encanta la piscina; pues bien, estos dos últimos días ha llorado al entrar porque le quitaba los zapatos y una vez en el agua, decía "mamo (vamos) con los papos (zapatos)".
- Antes los guardaba en un lugar accesible para ella. Hemos tenido que cambiarlos a un cajón alto y está como loca en la habitación buscando todos los días.
Es exagerado, si alguna vez vamos a salir y le ponemos unos zapatos que ella no quiere, se pone hecha una furia (a mí me da igual que no vaya conjuntada, lo que no permito es que salga en Sevilla y con estas calores con unas zapatillas de invierno como quería el domingo). A consecuec¡ncia de esto se pegó 3/4 hora llorando sin consuelo y yo sin saber qué hacer: si dejarla que se friera los pies o qué.
Hemos hablado con ella, le explicamos que los zapatos son para la calle, que en casa puede estar descalza como el hermano, etc. pero pasa olímpicamente de todo lo que le decimos, ella AMA a los zapatos de todo el mundo. Los coge, los besa , se los prueba, se los quiere llevar (en los vestuarios de la piscina hemos tenido algún que otro berrinche)
Todos los que nos rodean coinciden en que NO ES NORMAL ESTE COMPORTAMIENTO, que deberíamos llevarla al pediatra y comentárselo.
Preguntas:
-¿A qué edad pueden venir los comportamientos obsesivos?
-¿Le puede influir el hecho de tener más de un par de zapatos para bien o para mal?
-¿Es esto motivo de preocupación como para ir al médico? es que me da hasta un poco de vergüenza pero a su vez estamos realmente preocupados. Es que no os imagináis cómo es el asunto...
Muchas gracias, chicas.