Lugar donde compartir el día a día de nuestros pequeños.

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por Malefica
#348597 De lleno en “los dos años”, necesito una reubicación para los dos.

Ayer quisimos ir a casa de los abuelos en coche. Fue imposible. No quiere ni acercarse al auto. Si vamos paseando, vale, si no, a casa. Si intento, si intentamos convencerle, no conseguimos más que lloros y más lloros. No puedo ni sentarle en su silla y ponerle los cinturones, tiene tanta fuerza que me resulta no sé si imposible, pero si complicadísimo. Pensamos que puede estar asociando el coche con malestar, pero evidentemente entrar en una racha así limita bastante. Ayer nos volvimos a casa, no teníamos la obligación de movernos, cambiamos nuestros planes y fueron los abuelos los que vinieron a vernos.

Pero no me sentí bien con la situación. Llamé a una amiga y estuvimos charlando (gracias Clara). Fue ella la que me dirigió hacia este artículo de Jean Liedoff y me puse a leer más sobre ello.

http://cuatroenlacama.blogspot.com/2008 ... icado.html

http://asociacionsina.org/2009/05/15/en ... continuum/

Rescato algunos párrafos del artículo del blog cuatroenlacama que me están dando que pensar:

“Jean procedió a describir todos los errores comunes cometidos por padres que genuinamente tratan de hacerlo todo bien (llevando en brazos a sus hijos, amamantando y durmiendo con ellos). Aterrorizados por hacer algo mal y tratando duramente de salvar a nuestros chicos de toda la agonía que nosotros sufrimos de pequeños, nos sobrepasamos, precisamente en la dirección contraria (a lo que Jean se refiere como centrados-en el niño). Tratamos demasiado duramente de complacerles, y demasiado duramente de no enfrentarnos a ellos. Estamos demasiado atentos y demasiado sacrificados (¿Cómo Jean me conocía tan bien?). Parecemos culpables y ansiosos en nuestro trato con nuestros hijos, les pedimos permiso, y continuamente razonamos, explicamos y pedimos perdón. Todo esto pone al niño al control, y desde que lo que el niño por naturaleza quiere y necesita no es estar al control, sino una madre que lo esté, hace al niño inseguro y a veces enfadado.

“La niña necesita una madre que confíe y sea tranquila”, explicó Jean. “Una madre que sepa lo que hay que hacer, y que no le pida permiso a su hija. Puede parecer lo contrario, que la niña esté luchando por más control, pero irónicamente ella está luchando para no llevar el control y te está presionando para que te mantengas firme. Cuándo un niño siente que puede llevar el control, su impulso es presionar para ello. Ella no resiste esto, ya que es la naturaleza humana y es para lo que está programada.”


“La vida de un niño depende de sus padres. Ella espera de ellos protección, fuerza, y certeza. Ella quiere que ellos sepan qué es qué, lo que está bien, lo que está mal, qué hacer y a dónde ir. “Tu eres la adulta, mami, así que no me preguntes qué quiero hacer. Quiero que tu sepas, así puedo observarte, y seguirte, y ayudarte. Estoy tratando de empujarte hasta que te mantengas de pié y calmada, hasta que te mantengas firme. Así podré sentirme a salvo y segura, me podré relajar y contar contigo. No quiero ser capaz de presionarte, eso me pone nerviosa, pero si tú pareces tambaleante voy a seguir empujándote hasta estar segura que no te caerás. Empujaré y empujaré hasta que haga que tú sepas lo que haces, y entonces me encontraré bien. Entonces pararé de observarte y de probar tu fiabilidad”.


En la entrevista que os enlazo dice:

“Otra de sus recomendaciones es atender a los bebés sin que sean el centro de atención…

No deben ser el centro de atención. ¡Y no es lo que ellos quieren! Si tú eres la madre, no puedes estar pidiendo continuamente al bebé qué quiere hacer o qué quiere que haga mamá. Eso equivale a no comprender para nada el concepto del continuum. Más bien es Yo hago lo que hago y tu eres como un pasajero, que mira y aprende lo que hacen los adultos de esta cultura, de esta raza. El pequeño tiene un sentido natural de la jerarquía, entiende que los niños mayores saben más que él y los sigue para aprender qué hacer. Al principio participa de la vida de los adultos de forma pasiva, pero no como protagonista central y único. Durante miles de años, la persona que atendía el bebé lo hacía a la vez que otras cosas, normalmente trabajando en el campo con el niño encima, pero sin estar permanentemente pendiente de él.”


Bien, yo hago exactamente eso. Priorizo constantemente las necesidades de mi hijo. Soy capaz de buscar alternativas, cambiar planes, lo que sea, para que no se lleve un mal rato (salvo que nos sea completamente imposible), como dice Liedoff, intentando evitarle cualquier agonía. Sigo viendo a mi bebé, sigo llevando a la práctica la máxima de no dejarle llorar. Pero no puedo “salvarle” de absolutamente todos los malestares, hay que cortarle el pelo, hay que ir al médico cuando está malito, ponerle vacunas, y yo sólo puedo acompañarle, no evitarle su sufrimiento. Ya no es mi bebé, ahora es mi niño y creo que necesitamos reubicarnos ambos. Ahora mi duda, ¿cómo encuentro el equilibrio adaptado a los 27 meses? ¿Como podemos ir evolucionando en la búsqueda de esa armonía?

Miss Maléfica dixit.
"Gigoló" (vividora) de la maternidad
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Yo de mayor quiero ser.... EMPODERANTE
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por CORI
#348602 Buena pregunta y difícil respuesta.

Creo que lo primero de todo es hacer un análisis de las situaciones que necesitan cambiar: por ejemplo: los desplazamientos en coche, la hora del baño, no sé aquellas en que tu sientes que no tienes el control cuando debería ser lo contrario, y a partir de ahi, ver una nueva forma de afrontarlo, cómo hacerlo es complicado, creo que depende de muchas cosas, entre ellas el carácter del niño.
Quizás lo menos traumático sea comenzar haciendo tratos con él. Sin embargo esto no es un camino de rosas, y ya sabes lo tozudos que son estos niños nuestros, que en seguida te dan la vuelta a la tortilla, pasan del trato y al final acabamos cediendo y vuelta a empezar, se entra en un cículo vicioso del que cada vez cuesta más salir. Creo que es importante mantenernos firmes en ciertos temas, ellos necesitan seguridad y nuestra firmeza creo que de alguna forma se la da, aunque al principio ellos no lo acepten y se rebelen a grito pelao.

En un rato sigo con mi exposición, tengo que irme a comer :mrgreen: pero el tema que planteas me parece de lo más interesante.

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por Sashka
#348613 Interesantísimo este tema. No puedo escribir mucho ahora, que me voy a casa, pero decirte que hay cosas en las que yo no cedo. Procuro no cambiar de planes si no es por motivos de salud, emergencia, etc. Yo creo que en tu lugar sentaría al niño en la sillita, tardara lo que tardara, y lo acostumbraría poco a poco a peuqeños trayectos. Es que estás vendida y muy limitada. Y creo que Liedloff tiene razón. Necesitan una mamá fuerte que lleve las riendas. En lo que puedes cedeer, cederás, pero hay cosas que hay que hacer, y él tiene que aceptarlo, igual que todos tenemos que aceptar nuestras distintas obligaciones. ¿si no quisiera ir al cole qué harías? PUes eso. besos.

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por irenrub
#348617 Uff, tema muy interesante y muy complicado.
A mí también me gustaría saber hacerlo bien, saber encontrar ese equilibrio necesario entre las necesidades de mis hijos y el día a día.
Con mi hija mayor desde muy pequeñita ha sido una niña muy "madura" para su edad desde siempre, de fuerte caracter, pero con quien podias hablar, te escuchaba, podías pactar, llegar a acuerdos, te daba sus motivos, razonar de acuerdo a su edad. Con el pequeño me encuentro tal como tú describes, los terribles dos años no admiten razonamientos, ni pactos ni nada que no sea su santa voluntad en muuuchos casos. Tú ya sabes que hace muy poquito me vi sobrepasada totalmente por esto, pero creo que he logrado sacar un poco la cabeza buscando tambien el equilibrio.

En mi caso al menos; hay cosas que no son negociables, llore lo que llore. Se lo explico, las veces que haga falta con mucha paciencia, pero si no quiere pues entonces sí que llorará. Yo le acompañare, le consolaré si hace falta, pero si hay algo que tenemos que hacer, se hace de todos modos. Ya no es un bebé, me entiende perfectamente. Por ejemplo, si es la hora del cole, y no se quiere vestir, le aviso, una vez, dos, pero si aún así quiere seguir viendo dibujos, pues lo tengo que hacer aunque llore, no es negociable, su hermana tiene que ir al cole y evidentemente no lo puedo dejar solo en casa mientras la llevo. Por poner un ejemplo. O sin ir tan al extremo, si se tiene que bañar pues puedo esperar un poco que juegue, pero no toda la noche. LLora, pero vamos.

No sé, yo intento hablarlo todo mucho con él, explicarle porque hay que hacer algo, darle su tiempo, pero sino funciona pues entonces no puede ser lo que él quiera, si llora lo siento mucho, me duele oirle, pero hago lo que tenga que hacer.
Y así estamos, intentando buscar un equilibrio entre lo que él quiere, lo que sí que puede, lo que no podrá ser en ningun caso, y lo que el momento permite. Pero no es facil, por supuesto.

Irene ( 25/01/2005 ) y Rubén ( 25/04/2007 )
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por Kitudice
#348632 Pues nosotras vamos un poco en la línea del resto, hay cosas q no son negociables, pero no porque me importe ceder, si no porque no quiero una niña mimada y consentida. Si Nahia pide bien las cosas, pues bien, se negocia y se cede en muchas ocasiones, hablando se entiende la gente, pero si por el contrario pretende imponer su voluntad de malas maneras, pues mal anda, porque si yo no se lo hago a ella, ella tampoco a mí. Por supuesto hay cosas q no son negociables, como cualquier cosa q entrañe un riesgo para ella o los demás, pero en todo lo demás se intenta un dialogo recíproco.
Es dificil, hasta con niños dóciles y responsables como la mía o la de irerub. Yo la mayor dificultad la veo en q considere cada vez q yo cedo como un derecho adquirido, y luego ya lo de por supuesto. Siempre intento hacerle entender por qué hacemos las cosas como las hacemos, aunque a veces las conversaciones sean demasiado complejas para una niña tan pequeña, pero yo creo q entiendo mucho de lo q le digo, ya q se está convirtiendo en una personita excelente. Con esto q no parezca q yo no me desespero a veces, y q es un camino de rosas, porque para ser francos a medida q se hace más mayor más dificil lo veo.
A mí me costó comprender q ella necesitaba q yo fuera el adulto y le guiara, pero sinceramente creo q para formarse necesitan un ejemplo q seguir y unas pautas.
Está claro q esto es a rasgos muy generales, si ya hablamos de q Nicolás se marea en el coche y le tiene miedo, pues también hay q ser comprenisvos, y tratar de buscar la manera de q no le traumatice más el viajar, aunque siempre sin ceder del todo, orque si no el día q sea neceario viajar en coche será el peor de los traumas, y tampoco es plan. Yo ahora mismo estoy en algo parecido con Nahia e ir al water, son cosas q se escapan a su madurez, sólo saben q les produce malestar y hay q hilar muy fino para llegar a un buen entendimiento de todos sin dejarte ver derrotada. Pufff!!!! q dificil es esto, y eso con tan poca edad, q será de nosotras dentro de unos años?

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por Curcuma
#348633 Fijate que nosotros estamos igual, necesitamos un replanteamiento del asunto y un cambio de estrategia. Somos unas cuantas las que vamos a la par con nuestros hijos y sus "terribles dos años", tienen rachas y épocas de mejor y peor, ahora estamos entrando en otra mala, tanto que casi no puedo con él, con su fuerza y eso que es un pizquito, pero por ejemplo no consiente que le cambie el pañal cuanddo tiene caca, y me da patadas y manotazos, pero es que se lo tengo que cambiar si o si, porque se le pone el culete muy rojo, ya no vale el cantarle, contarle un cuento o despistarlo me dice que no directamente, igual pasa con salir del baño, lo pasamos fatal y es tooooooodos los días. La verdad es que pensaba poner un post sobre este comportamiento nuevo de mi hijo porque con la comida es mucho peor.

No sé, la verdad es que es muy muy complicado encontrar ese equilibrio, si tienes paciencia llegará y supongo que sabrás discernir dónde empieza una cosa y dónde acaba otra, pero sinceramente yo ya estoy mayor y me siento muchas veces tremendamente agotada y al límite.

Estas historias nunca se me plantearon con Amina, porque me pasa igual que a Lola, mi hija tiene carácter pero puedes razonar con ella y llegar a acuerdos y jamás me dió una patada o un manotazo, pero este Brunisky no tiene nada que ver con su hermana :???: . Y que conste que con su hermana cedo muchas veces, pero siempre con tratos de por médio o simplemente explicandole que sólo hoy por ejemplo, o algo similar, (supongo que la edad tambien cuenta), pero fijaros que no me veo yo a Bruno razonando como su hermana :roll: , y si pienso en dentro de 10 años................. jo que miedo me acaba de dar :shock: .

:fl No te he ayudado nada Montse, pero que sepas que no estás sola en esto :roll: . Ahhhhhhhh y si encuentras la fórmula mágica, no te olvides de nosotras ;-) .

Amilingüi Mayo 2003
Brunisky Junio 2007

"Nuestros hijos son nuestros pies en el mundo, nuestro amor por ellos es el eterno combustible de nuestro corazón, su destino es la flecha que tensa nuestro arco vital". (V.A.)
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por Kim
#348649 Has planteado un tema muy interesante, aunque por desgracia no puedo decirte nada útil :???: .
Admito que yo también priorizo al máximo las necesidades de mi hijo y hago lo posible para evitarle un mal rato. En parte sale de mi instinto y por tanto es un impulso casi inconsciente, pero a decir verdad también acabo pensando que en realidad los niños ceden muchísimo más que nosotros, se llevan más disgustos que cualquier adulto y ponen mejor cara de la que pondríamos nosotros si alguien nos llevara la contraria tan a menudo. Por este motivo, me lo pienso muy bien antes de obligarle a hacer algo que sé que no le va a gustar (hay excepciones pero suelen ser causas de fuerza mayor). No sé si te consuela, entiendo que lo ocurrido en el coche te haya sentado mal pero en tu lugar habría hecho lo mismo.
Así que posiblemente caiga en el mismo error, puede que trate demasiado de complacerle en vez de enfrentarme a él. En realidad, lo que intento es tratarle como a mí me gustaría que me tratara todo el mundo. Por eso igual soy blanda en algunos temas (¡qué más me da ponerle la camiseta que él quiere en vez de la que yo he elegido!) y estricta en otros (trato de enseñarle a tratar a los demás con respeto, porque cada ser humano lo merece). Digamos que trato de acompañarle en el camino, pero prefiero decirle "vamos juntos" que hacerlo desde la imposición, "voy a enseñarte adónde tienes que ir". Probablemente en el proceso cometo un sinfín de errores, no sé si debería incomodarme o limitarme a esperar los resultados dentro de unos años. :roll:

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por mamigatito
#348652 Un tema muy interesante y absolutamente enriquecedor si lo vemos entre todas de diferentes ángulos, pues nuestros hijos no van a reaccionar igual.
Tenía la fortuna de saber que llegarían los "terrible 2 años", de cierta manera estaba preparada ( teóricamente) a lo que tendríamos que enfrentarnos, estaba claro que había que tener un aspecto muy importante muy presente ELCARACTER DE DANI.
Ya desde muy pequeño, despuntaba por su caracter, sabía perfectamente lo que quería y cual niño testarudo objetaba, discutía, gritaba, lloraba, se golpeaba....todo para que prevaleciera su forma de ver las cosas.EL padre le decía que era James Dean, en la película "Rebelde con causa justificada".

No sé si es posible alcanzar ese equilibrio, tal como habeis explicado ellos los pasan muy mal ante situaciones que por más explicaciones que les demos, únicamente comprenden que NECESITAN HACER LO QUE PIDEN.Digo que sufren más porque después de todo nosotros como adultos podemos canalizar nuestras emociones ( hablamos con amistades, hacemos deporte, nos apoyamos en quienes queremos, tenemos vías de escape por así decirlo).Ellos con apenas 2 años, tienen una mezcla de emociones, al menos Dani con 2 años tenía un cacao mental en Sé que no debo hacerlo pero me pirra las ganas.

Bajo esa idea, ya con 18 meses habíamos encaminado con el padre que nuestras únicas prohibiciones ( no hay trato que valga) es cuando corriera peligro su vida.( Ir en coche con el cinturón puesto y en su silla).Eso para nosotros es innegociable, lo digo sobre todo cuando no hay más remedio que usar el coche.Recuerdo la de veces que él se ha negado a ponerse el cinturón y ahí que hemos esperado.Hasta que él tras hablar mucho ha aceptado y comprendido que estando en movimiento el coche jamás puedo ir sin el cinturón.

A medida que ha crecido comenzamos por normas en casa,aunque ya con 2 años había que dar explicaciones más extensas...consecuencias ( Dani las comprobaba in situ).
Nosotros hemos aprendido con el tiempo que antes de soltar un No, nos ponemos en su piel e intentamos ver el fondo de ¿por qué me pides esto?, acepta de buen grado los tratos, él es ahora el que los propone.
Darle a elegir para nosotros ha sido un buen punto de partida, siempre vamos con opciones. procuro saber el porqué se niega a algo que le hemos pedido.
No imponemos ( salvo la excepción del coche)si las cosas no son urgentes, lo hablamos las veces que haga falta.Siempre tenemos en cuenta sus propuestas, buscamos estar todos satisfechos cuando se toma una desición.
Eso sí armaros de muchísima paciencia porque lo vais a necesitar, cuando pase el tiempo os dareis cuenta que el esfuerzo lo ha valido.Porque el respeto con el que se le ha tratado desde chiquitín se vé ahora, el diálogo.

Todas vais al mismo punto de llegada RESPETO Y CARIÑO, aunque tomemos otras rutas, practicamente todas vamos en paralelo.Y puedo aseguraros que los frutos lo vereis sobre los 3 años que tienen un cambio grandísimo.

Un beso enorme

Mama de Dani (5/12/05)
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por clareta
#348653
Kim escribió: puede que trate demasiado de complacerle en vez de enfrentarme a él


Es que no se trata de eso, no es una guerra a ver quien puede más. Está claro, que no pasa nada porque un dia no se bañe, pero, qué pasa cuando se ha pasado el dia en el foso de la arena y lleva arena hasta en los agujeros de la nariz? Muchas veces no vale el darle explicaciones de que como va sucio se tiene que lavar. Es normal que no entre en razon porque lo que no quiere es bañarse y punto. PEro hay que entrar en la bañera, lo que pasa es que en vez de 10 min lo haremos en 2, pero hay que entrar.

Es que respetar ritmos y crianza natural no quiere decir ceder a sus caprichos.

Es muy posible que Nicolas se maree en el coche, pero con explicarle que van a hacer un viaje corto ya está, que solamente son 2 canciones, un ratito de pocoyo ........ en 5 minutos no se marean, y eso lo digo porque tengo un hijo que va con la biodramina a todos lados.

Kim, está claro que pueden elegir ellos la ropa, pero verdad que por mucho que te lo pida no va a salir de casa sin pantalones en el mes de febrero?? Seguramente l o que pase es que no quiera salir de casa, pero, te vas a quedar porque el no quiera salir?? Pues si hay que salir, se sale, y si no quieres estos pantalones, vamos a buscar otros que sí quieras ( o no).... pero hay que ponerse pantalones. No vas a dejar de hacer cosas porque a tu hijo no le venga en ganas, porque el dia que digas "hoy es preciso salir", lo serà para ti, no para él, y él no verá la diferencia entre un dia y otro.

De todas formas estamos hablando de rabietas distintas con edades distintas pues el origen, la intencion, y la solucion son diferentes, a mi modo de ver. No es la misma rabieta de no querer subir al coche con 26 meses que con 3 años y medio. El otro dia leí a alguien que escribió que quien dijo que las rabietas eran de los 2 a los 3 años, seguramente no tenia hijos, y lleva toda la razon.

El caso de mon es diferente, supongo que es mon quien necesita un cambio, otro punto de vista, aprender a ver a Nicolas como un niño y no como el bebé que fué, y eso implica muchas más cosas que un simple cambio de objetivo. Hay un articulo por ahi sobre hijos satelites, bueno pues el caso de mon, creo qeu ella es la mamá satélite que gira alrededor de NIcolas, y no digo que tenga que ser alrevés, pero ........... y en paralelo?

Tambien suelen decir que en cuanto el habla mejora, disminuyen las rabietas, y no estoy de acuerdo con ello porque muchas veces se cabrean, se enfadan por "algo" y ese algo no es físico, es emocional, es cansancio, es hambre. Mira, en esto tengo yo una anecdta, mi hijo, un dia lloraba y lloraba uqe le dolia la barriga, eran las 13.30 y no habia comido pero yo estaba tranquila porque se habia comido un platano a media mañana (tendria como 2 años) y pensando que si virus, que si gastroenteritos ............ pues no, era hambre , lo supe en cuanto encontré el platano guardado en el sillin de la bici, pero él, no sabia que eso era hambre, simplemente le dolia la barriga.

El equilibrio?' Pues mon, lo veras cuando te de un beso, cuando te regale una sonrisa, cuando vaya corriendo hacia ti........... ahi se compensará la balanza

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por ezte
#348658 Hola a todas,
bueno, yo estoy empezando con esta etapa y ufff en fin, se me hace complicada´y encuentro superinteresante el debate que habeis planteado porque yo le doy vueltas a lo mismo, más o menos, muy a menudo.
Evidnetemente yo creo que todos estamos de acuerdo en quehay puntos en que no se puede ceder, mi duda es, no hay negocio con el cinturon del coche, evidente, pero llegais a obligarlos fisicamente a subir a la sillita dle coche o esperais a que acepte pon´çerselo? tarde lo que tarde. Es que ami obligarle me hace sentir que abuso de mi fuerza física y esperarme lo que tarde´(si el tema s ealrga muchiiismo) me hace sentir que no contorlo nada. No sé, es complicado :sad:
Un abrazo

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por Kim
#348663 Creo que en el mensaje anterior no me he explicado bien, a ver si lo aclaro...
clareta escribió:
Kim escribió: puede que trate demasiado de complacerle en vez de enfrentarme a él


Es que no se trata de eso, no es una guerra a ver quien puede más. Está claro, que no pasa nada porque un dia no se bañe, pero, qué pasa cuando se ha pasado el dia en el foso de la arena y lleva arena hasta en los agujeros de la nariz? Muchas veces no vale el darle explicaciones de que como va sucio se tiene que lavar. Es normal que no entre en razon porque lo que no quiere es bañarse y punto. PEro hay que entrar en la bañera, lo que pasa es que en vez de 10 min lo haremos en 2, pero hay que entrar.

Estoy de acuerdo en que muchas veces no valen las explicaciones, pero se puede hacer de 2 maneras: o le digo que se tiene que bañar como sea aunque sea llorando, o trato de llegar a un acuerdo (nos damos un baño rápido, una ducha, nos metemos en la bañera con un juguete, intento motivarle - o chantajearle, según se vea - nos bañamos y después hacemos esto, etc). Si le doy alternativas, ve que estoy cediendo, que no es mi postura contra la suya, sino que intentamos llegar a un punto intermedio, y es probable que también ceda él (que elija una de las opciones que he propuesto o sugiera algo aceptable). Con 3 años y 1/2 me está resultando relativamente fácil, con 2 era dificilísimo, pero empezamos a sentar el antecedente, por así decirlo. Si todo falla, tendremos que recurrir a la imposición, pero por experiencia es mucho más probable que lleguemos a un acuerdo si negociamos que si le digo que se tiene que bañar sí o sí.

clareta escribió:Es que respetar ritmos y crianza natural no quiere decir ceder a sus caprichos.

Depende un poco de lo que entendamos por capricho. Personalmente, no considero tal todo lo que se oponga a mi voluntad. Capricho es cuando quiere algo sin razón, por llevar la contraria. Eso le suele pasar cuando está cansado, molesto, hambriento o no se encuentra bien. Como norma general, quiere algo por un motivo concreto, que para mí puede ser absurdo pero para él no, entonces creo que no se puede ignorar. Se puede debatir, discutir, dialogar pero no pasar de lo que pide sin más.

clareta escribió:El caso de mon es diferente, supongo que es mon quien necesita un cambio, otro punto de vista, aprender a ver a Nicolas como un niño y no como el bebé que fué, y eso implica muchas más cosas que un simple cambio de objetivo. Hay un articulo por ahi sobre hijos satelites, bueno pues el caso de mon, creo qeu ella es la mamá satélite que gira alrededor de NIcolas, y no digo que tenga que ser alrevés, pero ........... y en paralelo?

Sigo identificándome con mon, en el ejemplo que propuso, tal y como lo veo, lo esencial era que Nicolás viera a los abuelos, no que se subiera al coche. Al final los vio, y solucionado. Probablemente yo también soy una mamá satélite (o más bien al contrario, él es el sol y yo la tierra, giro a su alrededor y necesito su luz para que me ilumine :grin: ), pero no me convence mucho lo de adaptar al niño a mi ritmo y no viceversa. En cierto modo es así, mi niño me acompaña a hacer la compra, al banco, me espera si tengo que llamar por teléfono, hace un sinfín de cosas que no le apetecen lo más mínimo solo para estar conmigo, y creo que es de rigor pagarle con la misma moneda, hacer planes a su medida, intentar hacer un esfuerzo al igual que lo hace él.

ezte escribió:no hay negocio con el cinturon del coche, evidente, pero llegais a obligarlos fisicamente a subir a la sillita dle coche o esperais a que acepte pon´çerselo? tarde lo que tarde. Es que ami obligarle me hace sentir que abuso de mi fuerza física y esperarme lo que tarde´(si el tema s ealrga muchiiismo) me hace sentir que no contorlo nada. No sé, es complicado

Sí, es complicado... Personalmente no soy partidaria de subirle a la silla a la fuerza. No lo descartaría si fuera una emergencia y tuviéramos que salir pitando, pero en condiciones normales intento tener paciencia, ir explicándole que hay que subir, que si no sube no nos podemos ir, que si va sin atar nos para la policía, lo que se me ocurra. Puedes darle un volante o un coche de juguete para que vaya conduciéndolo a la vez que tú (con la condición de que suba primero), lo que se te ocurra. También es buena idea, si piensas que se va a dar ese tipo de situación, empezar con muchísima antelación para irle preparando y no ponerte nerviosa con las prisas (si luego llegáis antes, hacéis tiempo ;-) ).

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por Kitudice
#348670
ezte escribió:llegais a obligarlos fisicamente a subir a la sillita dle coche o esperais a que acepte pon´çerselo? tarde lo que tarde. Es que ami obligarle me hace sentir que abuso de mi fuerza física y esperarme lo que tarde´(si el tema s ealrga muchiiismo) me hace sentir que no contorlo nada.

Cuando Nahia era más pequeña también me sentía así, con el tiempo he llegado a la conclusión de q ella también abusa de su fuerza, y no es q eso me de via libre a lo mismo, es sólo q de alguna manera tengo q ser el adulto en esta relación. Si no quiere subirse y le dejo jugar y remolonear en el coche mientras le explico lo q pasa, sólo consigo en muchas ocasiones q me diga q bien, q ya se va a subir pero q está jugando un poquito, con lo q en realidad no entiende q está haciendo algo mal, si no q piensa q lo estamos hablando y hay un rato para todo. Si me pongo firme normalmente no tengo ni q subirle a la fuerza, porque ya sabe q me sienta mal lo q está haciendo y q no está bien. Una vez atada le explico de nuevo q en el coche tenemos q ir atadas para evitar peligros y demás, pero vamos, q no le dejo margen a q piense q es decisión suya ponérselo o no. Está bien q quiera, q entienda q lo necesita, pero también está bien q entienda q hay cosas q hay q hacer nos gusten o no, y no nos engañemos, con ciertas edades comprenden más de lo q se espera de ellos, pero tampoco son adultos, así q hay cosas q hemos de hacer nos gusten o no, q para eso somos sus madres.
Es complicado educar e imponerse a otra persona, pero si nosotros no les enseñamos habrá muchas cosas q se queden sin aprender, y no me gustaría q mi hija fuera una de esas personas q piensa q ellas son lo primero en este mundo. Cada vez q le riño por algo y me siento mal, pienso en el tipo de pesona q no quiero q sea, y en´el porqué hago lo q hago. Ojo, se q me puedo equivocar, pero al menos lo intento, y es imprescindible para mí saber q hago todo lo q está en mi mano por mi hija.

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por Juanma
#348737 Para mí el equilibrio tiene diferentes connotaciones:

:fl Si fuera una balanza en la que cada uno va aportando sus necesidades hasta que llegas a situaciones de compromiso. El problema es que el bebé tiene un platillo muy pequeño y necesidades muy pesadas y los adultos tienen un platillo muy grande que necesitan llenar de necesidades ligeras pero cuantiosas.

:fl Si estiramos de una cuerda hasta llegar a un equilibrio de fuerzas, nos encontramos con el problema de que nosotros tenemos tanta fuerza y el bebé tan poca, que al final solo tiramos nosotros de la cuerda, a veces en nuestra dirección y otras en la dirección del bebé, con una mano a cada lado de la cuerda para que quede tensa.

:fl Si caminamos por un alambre como un funambulista con el bebé en brazos estarás todo el tiempo sufriendo. ¿Se me caerá el bebé, me caeré yo? Cuando empieza a gatear y caminar solo por el alambre, estarás sufriendo detrás del bebé y al mismo tiempo pendiente de no caerte tú. Nunca pensarás que el alambre es suficientemente seguro para tu hijo.



Yo creo en la armonía como si de música se tratara: Al principio estás acostumbrado a tocar en dúo y cuesta integrar un nuevo músico a la compañía. Además, el músico nuevo toca su manera pero, poco a poco, ensayando, cambiando tu estilo de tocar, va surgiendo una melodía que se hace agradable a los oídos.

Pero cuando ya crees que has conseguido componer una partitura que gusta a todos, el pequeño músico rompe su instrumento contra el suelo y coge otro. Y vuelta a empezar, solo que esta vez, encima, parece que desafine a propósito. Entonces empezáis a ensayar otra vez, te intenta ayudar a escribir la partitura y cuando parece que esta vez sí que lo habéis conseguido, otra vez rompe su instrumento y coge otro. Y así una y otra vez.

Entonces empiezas a recordar todos esos instrumentos que probaste hasta encontrar el tuyo; y aquella vez que otro te lo rompió contra el suelo; cuando te obligaron a tocar un instrumento que no te gustaba; o ese adulto presuntuoso que te decía que tú no sabías y te lo quitaba y se ponía a tocar él. Recuerdas cómo todo eso hizo sentirte, lo que te costó volver a confiar en la música.

Lees a los expertos en música, recibes consejos de todo tipo, sobretodo de gente que nunca ha tenido oído musical y, al final, te das cuenta de que nunca acabarás de escribir la partitura perfecta. Te das cuenta de que por muchas teorías y consejos que recibas, lo que cuenta es lo que sientes en tu interior cuando la tocáis juntos, que con nuestros defectos y nuestras virtudes, seamos capaces de encontrar la armonía.



Definición de equilibrio de la RAE:
1. m. Estado de un cuerpo cuando fuerzas encontradas que obran en él se compensan destruyéndose mutuamente.
2. m. Situación de un cuerpo que, a pesar de tener poca base de sustentación, se mantiene sin caerse.
3. m. Peso que es igual a otro y lo contrarresta.
4. m. Contrapeso, contrarresto, armonía entre cosas diversas.
5. m. Ecuanimidad, mesura, sensatez en los actos y juicios.
6. m. pl. Actos de contemporización, prudencia o astucia, encaminados a sostener una situación, actitud, opinión, etc., insegura o dificultosa.

Definición de armonía de la RAE:
1. f. Unión y combinación de sonidos simultáneos y diferentes, pero acordes.
2. f. Bien concertada y grata variedad de sonidos, medidas y pausas que resulta en la prosa o en el verso por la feliz combinación de las sílabas, voces y cláusulas empleadas en él.
3. f. Conveniente proporción y correspondencia de unas cosas con otras.
4. f. Amistad y buena correspondencia.
5. f. Mús. Arte de formar y enlazar los acordes.
6. f. El Salv. curiosidad (‖ deseo de saber o averiguar algo).

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por ALALA
#348739 Mon, la verdad es que ya te han dado unas respuestas estupendas. Yo no tengo la "receta" para encontrar el equilibrio, yo misma no lo he encontrado aun, pero sí puedo contarte un poco mi andadura en este tema.

No cabe duda de que como madres se nos remueven las entrañas al ori llorar a nuestros hijos, pero es que hay veces que no queda otra, ya no es una cuestión de no dejarles hacer algo porque sea peligroso para ellos, es que hay veces que hay que hacer las cosas porque son así. Como ya han comentado, puedo saltarme un día el baño, pero al día siguiente es intocable, hay que bañarse sí o si, y ya tenemos el lío montado, qué pasa una vez que ha entrado en la bañera? pues que tenemos el lío para salir, luego el problema no era que no quisiera bañar, el problema es otro, que está muy cansada, enfadada, hambrienta... o simplemente soy yo la que no está bien, porque yo creo que eso les influye mucho, muchísimo, los peores días de Alejandra coinciden siempre con un día horrible para mi ¿coincidencia? No quiere sentarse a comer ¿porque no quiere comer o porque no quiere hacerlo sentada?? creo que ni ella misma lo sabe, no sabe lo que quiere y finalmente acaba haciendo lo que le digo, pero claro ha tenido que llorar y protestar durante un rato.

Alejandra sabe que si yo le digo que tenemos que hacer una cosa, la vamos a acabar haciendo se ponga como se ponga, porque son cosas fundamentales, cosas que hay que hacer, hay que comer cada día, poco o mucho, yo entiendo que pueda no tener mucho hambre, pero hay que comer, eso no se negocia, lógicamente no puedo meterle la comida por las orejas, pero se sienta en la mesa, y si quiere ir mirando un cuento o algo así la dejo, pero tiene que comer algo, y es así, me da igual que se enfade, hay ciertas cosas que no son negociables, entiendo que no le guste un alimento determinado y en eso cedo, pero tiene que comer.

No sé, hay ciertas cosas que para mi no admiten discusión. En el resto cedo, la dejo escoger, me da igual, puede decidir ella, pero hay cosas que decido yo, sino esto sería "la casa de tócameroque" y de eso nada.

Dicho así quizá parezca que soy un sargento, pero no, nada más lejos de la realidad, hace de mi lo que quiere, pero siempre dentro de unos límites.

Un beso.

Por favor... dejen que juegue, que me divierta, que sea feliz.
Soy un niño, no lo olviden.
Y sólo una vez en la vida.
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por Kim
#348744 Juanma, me ha encantado lo que has escrito :clap:

♥ Mamá de dos polluelos que dieron forma a mis sueños y los hicieron realidad ♥
Escritora, bloguera, traductora, y un montón de cosas más... :mrgreen:

Mi blog: El mundo de Kim

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