Hemos viajado mucho, hemos tenido separaciones porque papá viaja por trabajo y no siempre fue posible ir con él. Ahora hemos emigrado a Panamá y somos sólo los 4. Pronto 5.
Sin familia cerca, sin viejos amigos en quien apoyarse pues aunque existe la tecnología no quieres que tengan solamente el panorama de las crisis y terminas no siendo la nube gris.
Hace dos años supe que mi esposo desde antes de estar embarazados me ha sido infiel... en el momento que lo descubrí pensé en dejarlo y separarnos pues me cuesta digerir esto de la falta de compromiso... del abuso de la confianza que puse en él. Vivir en una mentira por tanto tiempo es duro...
Decidimos ir a terapias y las cosas caminaron mejor... nada perfecto pero al final del día la confianza no se construye en meses y ninguna pareja es paz y amor todo el tiempo... yo sabía que esta herida tomaría mucho en sanar pero estaba dispuesta a darnos esa oportunidad.
Ahora, embarazada de mi tercer bebé -una niña esta vez- pasamos por altibajos como toda pareja... y es mi percepción de normalidad hasta hoy que mi esposo me manda un mail pidiéndome que no responda... que no hay nada que decir... pero que no quiere separarse -su argumento son los niños- aunque sabe que la relación no tiene salvación. Me dice que estamos "atascados" y pero que como pareja ya no hay remedio.
Estoy en casa, tratando de dedicarle tiempo a los niños y las cosas de la casa, tratando de mantenerme compuesta para la jornada laboral de mañana... ocultando el dolor y las lágrimas. Y sin poder confiarle esto a nadie pues nadie será capaz de entender en la justa medida todo lo que se siente... todo lo que me pasa. Mi madre y hermana, incluso mis mejores amigas, tomarían partido de una vez y no quisiera que la huella se esparciera sin necesidad.
Apelo a las amigas virtuales, esas mamitas que creen en el amor a las familias, en el amor a los hijos... que tienen las prioridades muy parecidas a las mías... pero que también son mujeres y pueden tal vez contarme sus historias sin juzgar... definitivamente lo mínimo que necesito ahora es dejar salir todo esto... así que allí va... una situación que me remueve en secreto desde hace mucho y que al fin dejo caer la carga. Perdida y desorientada.